Para diferenciar la paja del trigo, es necesario que sepas cuáles son esos mitos que debes desechar de tu mente. Aquí tienes cinco de los más comunes:
El sereno es malo en la cuarentena
Esta es una de las leyendas más sonadas: el aterrador sereno que hace daño a los recién nacidos en sus primeros 40 días de vida.
Muchísimas madres e hijos permanecen encerrados en su habitación, en cuarentena, como si se tratara de una prisión. Temiendo, incluso, a la gente que llega de noche porque trae encima el sereno.
Pero el hecho es que “el sereno no existe y la brisa nocturna no tiene efectos negativos en los niños”, asegura el médico internista y pediatra Édgar García.
“Que llore para que se le maduren los pulmones”
Más de uno recomienda a las madres, especialmente a las primerizas, dejar llorar al niño para que sus pulmones maduren. La realidad es que no existe basamento científico que relacione el llanto con el desarrollo pulmonar.
Por el contrario, emocionalmente, el bebé se ve afectado al no obtener atención al llorar; necesita sentirse protegido desde el primer día de vida.
Es malo cortarles las uñas
Puedes cortarles las uñas a tu bebé horas después de su nacimiento. Aunque son muy blandas, usualmente vienen largas y por eso siempre terminan por arañar su carita.
Lo mejor es usar unas tijeras pequeñas, especiales para ellos.
Tos y estornudo: señales de enfermedad
Es totalmente normal que los recién nacidos tosan y estornuden varias veces al día, que lo hagan no es sinónimo de enfermedad, al contrario, son respuestas naturales de su sistema respiratorio.
La función del estornudo es la limpieza nasal, mientras que la tos cumple con la misma tarea, pero con las vías respiratorias.
Un hilo mojado desaparece el hipo
Es usual ver a las abuelas colocar un hilo mojado en la frente del bebé cuando tiene hipo. Este es otro de los hábitos sin ningún fundamento, pues el hipo desaparece por sí solo.