Cuando llegan los conflictos en el hogar, aparecen uno tras otros como una avalancha de malas energías que parece no tener fin. La poca tolerancia, la falta de empatía y los propios intereses son los detonantes para que cualquier punto en el que no hay conceso se convierte en una discusión prolongada, que da pie de otras. El por esto que es en este momento cuando se debe apelar a los métodos del Feng Shui.
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Esta filosofía milenaria vendrá a poner orden en las energías que hay en tu espacio de cobijo, y también para atraer toda la buena vibra que haga falta para equilibrar el lugar. Hay que tomar algunas medidas básicas antes de comenzar con los rituales.
Para esto hay que poner fuera de la vista cualquier objeto punzo cortante, como tijeras, cuchillos o navajas porque estás representan las rupturas energéticas. También hay que deshacerse de objetos rotos, zapatos viejos que no usas, relojes dañados y objetos puntiagudos.
De acuerdo con Yuen, maestra taiwanesa de Feng Shui y I Ching, afirma en su canal de Youtube Escuela Solo corazón, que muchas veces los conflictos en las viviendas están alimentados por la ubicación de la cocina, ya que esta filosofía le asigna a cada parte del hogar un animal propio del feng shui, que en ese caso debe estar regido por el dragón.
Sin embargo, si te paras frente a la puerta principal y la cocina queda a tu mano izquierda, quiera decir que es el tigre el que está rigiendo esta zona y causando los problemas. Para esto es necesario pintar el lugar de blanco y usar objetos de metal que no generen un reflejo excesivo. También puedes usar cosas transparentes. Ahora sí, también debes hacer este ritual:
1. Ritual para callar las discusiones
Necesitarás un plato blanco de porcelana, azúcar blanca, canela en polvo, hierbabuena, velas pequeñas blancas y miel. Todo esto calmarán los rencores.
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Procedimiento
En el medio del plato colocarás la vela de deberás prender con cerillos de madera. Luego harás un círculo con azúcar alrededor de la vela, seguido de uno de hierbabuena y la canela. Posteriormente, impregnarás de miel tu dedo índice, ya sea el derecho o el izquierdo, y dejarás caer cuatro gotas que representarán los puntos cardinales.
Con el resto de miel que te quede unirás los cuatro puntos. Esto hará que los problemas se queden confinados en ese espacio. Dejarás esto hasta que la vela se consuma. Es recomendable que se realice después de las 12:00 de la medianoche. Una vez que la vela se consuma, mezcla con ligeros todo lo que hay en el plato y échalo por el sanitario. En tanto, el plato lo dejas sumergido en agua caliente, para luego lavarlo con lo agua y sal.
