Diciembre trae dos novedades: mercurio retrógrado y Navidad, una combinación que para algunos puede resultar problemática.
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Sin embargo, los expertos aseveran que no hay que tenerle miedo a este fenómeno astrológico, sino aprender a canalizar mejor su energía y trabajar aquello que pueda resultar problemático en la interacción con los demás.
Así es como debes sobrellevar Mercurio retrógrado y Navidad
No supongas nada
De acuerdo con Hola, uno de los efectos más importantes que se verán en la temporada de Mercurio retrógrado y Navidad son los problemas de comunicación o discusiones por malos entendidos. Entonces es un mes ideal para no suponer nada, tener paciencia y hacer las preguntas correctas que permitan sostener diálogos sanos.
Priorizar a la familia
Asimismo, es normal que por estos días hayan trámites, negocios, contratos o demás respuestas que estamos esperando que tarden en llegar, tengan retrasos u obstáculos inesperados. Con esta información a la mano, es hora de que te relajes y le des prioridad a tu familia mientras lo demás se pone en orden. No lo fuerces y disfruta las fiestas.
No tomes decisiones importantes
Otra recomendación de los expertos es no aventarse a proyectos o decisiones a largo plazo estos días, ya que muy probablemente no duren con el paso del tiempo, puesto que nacieron más desde la impulsividad. “Este periodo nos invita a la reflexión, a revisar nuestros planes y a ser más cautelosos en nuestras interacciones diarias. Es un tiempo para la introspección, no para tomar decisiones importantes o iniciar nuevos proyectos”, advierten.
Organízate
Para algo positivo que puede servir esta pausa de Mercurio retrógrado y Navidad es para organizar tus asuntos pendientes, corregir errores, planificar y pensar bien las cosas. Conecta contigo mismo y proyecta qué quieres lograr en 2024.
Sé flexible
“Mantente abierto a cambios de planes y adapta tu agenda según sea necesario”, recomiendan, así como también es bueno ser empático, comprensivos y serenos con las decisiones o actitudes de terceros. Es una etapa para reconciliar y no dividir.