¿Quién no ha estado en la búsqueda incesante de trabajo, en especial después de la cuarentena radical por la Covid-19? Contar con un empleo que te garantice tus finanzas para solventar tus necesidades es vital, pero parece que a algunos les cuesta un poco concretar ofertas, es por esto que hoy te traemos varios rituales para que esas posibilidades se vuelvan realidad y culmines el 2022 con buen pie.
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Lo importante es que pongas de tu parte, que mantengas una actitud positiva y, sobre todo, que salgas a buscar ese puesto que tanto sueñas porque, aunque hagas el ritual, pues no funcionará si tú no pones de tu parte.
Ritual de la Divina Providencia
Vas a necesitar un ladrillo, tabique o pequeño bloque rojo, papel aluminio, un bol de cristal, agua, cuatro velas blancas, cuatro monedas, sal marina gruesa, fósforos de madera, una pequeña campana y romero.
Procedimiento
Vas a tomar el bloque rojo y lo forrarás con el papel de aluminio, una vez que esté todo cubierto coloca el bol de vidrio encima con un poco de agua. Adentro colocarás una de las velas blancas. En cada una de las esquinas del ladrillo dispondrás las monedas y sobre ella echarás un poco de sal. Una vez que tengas listo esto, vas poner las otras tres velas blancas a los lados del tabique y en las esquinas las hojas de romero.
Enciende de las velas con fósforos de madera, un yesquero o encendedor solo anulará las energías. Una vez listo todo, vas a sonar la campana mientras haces movimientos circulares alrededor del ritual.
Paralelamente pronunciarás la oración de la divina providencia: “¡Oh Divina Providencia!, ¡Concédeme Tu clemencia y Tu infinita bondad! Arrodillado a tus plantas, a ti caridad portento. Te pido para los míos: casa, vestido y sustento. Concédeles salud y llévalos por el buen camino y que sea siempre la virtud la que los guíe en su destino. Tú eres toda mi esperanza. Tú eres el consuelo mío, en ti creo, en ti espero y en ti confío. Tú, Divina Providencia se extienda en cada momento, para que nunca nos falte: casa, vestido y sustento, ni los santos Sacramentos en el último momento. Amén”.
Una vez que culmine la oración, guarda el romero en un cajón o en tu cartera. Repite este ritual el primer día de cada mes.
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Ritual del laurel
Busca agua, una vela verde de cualquier tamaño, tres hojas de laurel frescas o secas, un papel blanco, un bolígrafo o plumón azul o verde, una copa de cristal transparente sin dibujos y fósforos de madera.
¡Comenzamos! Enciende la vela verde con el cerillo de madera y visualiza tu objetivo, piensa con fuerza y fe todo lo que quieres. Pide bien. Toma el papel, escribe con el lapicero de tina verde o azul tu nombre completo y lo que quieres, por ejemplo: “Deseo con toda mi alma obtener el empleo de diseñador en esta agencia de marketing, donde me pagarán bien y valorarán cada una de mis virtudes y talentos”.
Una vez que termines de hacer esto, vas a doblar cuatro veces la hoja y la pondrás entre tus manos, donde nuevamente pedirás con fuerza al cosmos o a San Judas Tadeo eso que tanto deseas.
Ponlo en la copa con las tres hojas de laurel y, ahora, echarás agua. Todo se mojará y flotará. Déjalo a un lado de la vela. Cuando la vela se consuma, los restos los tirarás a la basura, afuera de la casa y conservarás la copa por siete días. Esta debes colocarla en donde no le llegue la luz directa y que nadie la toque.
Si te sale en trabajo ante de la semana, consérvala hasta completar los siete días y luego bota todo al tacho de la basura en la calle. Si no hay cambio en 15 días, repite el ritual porque quizás tienes algún bloqueo.
¡Suerte y éxito!