Aunque las veamos como superheroínas, las mamás también necesitan tomarse un descanso y hay claras señales de agotamiento que lo avalan.
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Su entrega es infinita y parecieran ser incansables, pero al igual que todos los seres humanos también tienen necesidades, deseos y sueños que deben ser atendidos, porque traer niños al mundo no significa que deban perder su individualidad.
Esquivar estos signos de desgaste es muy contraproducente. Esto, porque el estrés, el cansancio y la depresión harán mella en la productividad de los días y las relaciones con los demás, por lo que tomar tiempo para sí mismas es un beneficio para toda la familia en general.
Señales de que una mamá necesita un descanso
Agotamiento constante
Pese a que logras conciliar el sueño por las noches, te levantas igual de cansada y tu energía está en números negativo a diario. La motivación es tan baja que hacemos las cosas en automático y ni siquiera el café parece ayudarnos.
Esto es claro signo de que la presión y la alta exigencia que tienes te está llevando a padecer el síndrome del burnout.
Este aparece como respuesta a un estrés crónico y el cansancio emocional y físico que se experimentan día con día. Es hora de empezar a poner límites, decir que no, pedir ayuda y delegar cosas.
Irritabilidad
La fatiga mental hace que para todo tengas una mala respuesta, tienes menos paciencia con los niños, todo te enoja, sufres cambios radicales de humor y explotas más fácilmente.
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Te vendrá bien salir de casa sin los niños, pasar tiempo con las amigas, disfrutar de tus pasatiempos y de tu lado social ocasionalmente. Asimismo, trata de tener tiempo para alguna actividad física.
Mala memoria
Olvidamos todo y es común que pensemos que antes teníamos mejor memoria. Esto sucede porque tu cerebro está cansado y le cuesta más concentrarse. A sí mismo, tienes tantas cosas en la agenda, que es difícil dedicarle tu atención de lleno a todo.
