MSCHF es un colectivo de Brooklyn que ironiza sobre el fervor a las marcas de moda más deseadas (así como a sus logos), destrozando sus productos para hacer piezas nuevas y subversivas que se han hecho virales. Las locuras de MSCHF, el colectivo que se burla del lujo
Así, reflexionan a través del consumo sobre estos mecanismos de deseo y convierten estas piezas en arte conceptual que juegan con la exclusividad y la inmediatez.
Estas son sus piezas más comentadas (y polémicas).
Birkinstock
Las famosas sandalias se hacen con base en dos bolsos de Hermés que despedazan, el Birkin y el Porosus Crocodile Birkin 35, que cuestan hasta 40 mil dólares.
De resto, usan todo el modelo de las famosas sandalias que venden desde 34 mil dólares y se encargan en su página web.
Las locuras de MSCHF, el colectivo que se burla del lujo
Satan Shoes
Se crearon en colaboración con el rapero Lil Nas X y son imitación de las Air Max 97 de Nike.
El colectivo le puso un colgante de bronce en forma de pentagrama y una gota de sangre que la marca afirma que es de miembros del equipo. Vendieron 666 pares por 1018 dólares aludiendo al versículo de Lucas 10:18 (“yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo”.
Esto también se ve en la canción Montero, single del rapero. Nike demandó al colectivo, pero los zapatos se agotaron.
Las locuras de MSCHF, el colectivo que se burla del lujo
Axe No. 5
Este hijo verde neón del Chanel N. 5 y la marca de desodorantes Axe se agotó en veinte minutos por 400 dólares.
Por supuesto, el hecho de combinar universos olfativos y estilos de vida tan distintos al subvertir una de las marcas más famosas del mundo, fue lo que atrajo a los compradores.
Jesus Shoes
Los lanzaron en 2019. Están basados en el mismo modelo de los Satan Shoes, pero en la cámara de aire les pusieron agua que dicen traer del río Jordan y está bendecida de por un cura.
Aluden a Mateo 14:25, que narra cuando Jesús camina en el agua. El rojo emula al Vaticano y también tiene el sello papal (en su versión).
El zapato está perfumado con el incienso usado en Roma y tiene un crucifijo entre los cordones. Se vendió en 1425 dólares.
