Comenzar la dieta y los ejercicios no es una decisión fácil, pues exige compromiso, constancia y responsabilidad. Pero qué tal si incentivas tu cuerpo con una saludable comida y hoy te recomendamos un sabroso coliflor rostizado. Su preparación es accesible hasta para quienes no tienen destreza en la cocina, ya que con unos sencillos pasos lo tendrás en tu mesa.
El coliflor es una planta de cabeza enteramente blanca, que es la parte a consumir. Las hojas que lo rodean también son comestibles pero usualmente se descartan. Para quienes no lo han probado, el alimento posee un sabor suave y en ocasiones dulce. Los botánicos afirman que su mejor momento se produce entre septiembre y enero.
Ingredientes para el coliflor rostizado
- Un coliflor
- Aceite de olivda (una cucharada)
- Queso parmesano (1/4)
- Ajo en polvo (dos cucharadas)
- Sal (una cucharada)
- Pimienta (una cucharada)
- Huevos (4)
- Un aguacate en trozos
- Orégano fresco
Aunque todos los componentes son importantes para el coliflor rostizado, el aceite de oliva es opcional. Igualmente la pimienta, sobre todo para aquellos que son alérgicos a este condimento. Las cantidades están seleccionadas para cuatro porciones.
Manos a la obra
– Lo primero es que precalientes tu horno a unos 200° centígrados. Lo ideal es que esté listo para cuando vayas a introducir el coliflor.
– Toma una tabla de cocina y corta el coliflor en rebanadas de 3 a 6 centímetros. Colócalas en la bandeja para horno y baña con el aceite de oliva con ayuda de una brocha. También puedes utilizar aceite vegetal. Seguidamente añade queso parmesano, el ajo, la sal y pimienta.
– Con el horno ya precalentado, mete el colifor y deja cocer durante unos 15 minutos o hasta que dore.
– Mientras tanto corta el aguacate en pequeñas rodajas. Estas reposarán encima de las rebanadas de coliflor.
– Cuando esté por cumplirse el tiempo del horno, coloca un sartén al fuego, caliente un poco de aceite y pon a cocinar el huevo. Finalmente arma el coliflor rostizado con el aguacate, integra el huevo encima y adorna con la ramita de orégano o en polvo.
Las bondades del coliflor
Favorece la digestión: La planta posee un alto contenido de fibra, la cual es beneficiosa para la salud digestiva. Según el portal Vía Orgánica es uno de los aimentos más saludables del mundo.
Vital para el corazón: La presencia de sulforafano mejora no solo la presión arterial sino las funciones renales. Científicos afirman que esta sustancia de azufre es un potente anticancerígeno, ya que combate las células madre y retrasan la formación del tumor.
Múltiples vitaminas y minerales: Una porción de coliflor supera los niveles diarios y necesarios de vitamina C. Además, es una fuente de vitamina K, magnesio, fósforo, ácido fólico, potasio, vitamina B6 y hasta tiamina.
Nutrientes antiinflamatorios: Este alimento opera a nivel genético para controlar las reacciones inflamatorias, gracias a que posee un compuesto llamado indol-3-carbinol. Pese a no evitar las hinchazones musculares, trabaja para evitar que estas se compliquen.
Desontixcante: El coliflor aporta antioxidantes que ayudan a la limpieza del organismo. Además, contiene glucosinolatos que activan enzimas encargadas de desintoxicar.
En ensaladas, como contorno e incluso crudo. Estas son diferentes formas en que puedes disfrutar del coliflor. Otra manera es convertirlo en puré, siendo un acompañante altamente saludable.
Pese a su similitud en la textura, el coliflor y brócoli son dos alimentos distintos. No solo por el color particular del segundo, sino que este posee un mayor contenido de calcio. Sin embargo, el primero gana el duelo en vitamina B6 y ácido pantoténico, ideal para la producción de glóbulos rojos y hormonas de la sexualidad.
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