De color pálido y jugosa, la carne de cerdo es la tercera más consumida en Chile. Una buena noticia porque es una excelente fuente de proteínas de alto valor biológico.
Te damos algunas ideas de cómo aprovechar las propiedades de la carne de cerdo y aprovechar sus propiedades y disfrutarla sin culpas.
Sabor casero
El presidente del Colegio de Nutricionistas, Paolo Castro, dice que una buena opción para incluir la carne de cerdo de manera saludable, es preparando platos tradicionales de la comida chilena con ella, como la carbonada. Es una forma fácil de variar los tipos de carne que consumimos sin tener que planear recetas totalmente nuevas.
Con cereales
Lo importante es considerar el valor nutricional de lo que acompañe a la carne. Por eso se recomienda privilegiar la ingesta de arroz integral por sobre el blanco, ya que contiene más fibra. El choclo también es un buen acompañante del cerdo, ya sea cocido o como más te guste.
Hortalizas
Como ensaladas o guisos, las verduras y tubérculos son siempre los acompañamientos ideales. Tienen un gran valor biológico, pero para aprovecharlo hay que respetar los tiempos de cocción.
Una forma de mantener las propiedades de las verduras es asándolas en vez de cocinarlas por completo. Además no es necesario usar aceites para prepararlas; con un poco de aliños o una vinagreta puedes tener una ensalada invernal con carne magra de cerdo.
Frutas para los osados
Una opción para los más curiosos de las artes culinarias, es agregar frutas a las preparaciones. La ciruela queda muy bien con el cerdo, ya que su sabor agridulce resalta los tonos suaves del cerdo.
Freír o no freír
La idea es evitar preparaciones fritas, pero no porque sean malas en sí, sino porque aportan más calorías, lo que no ayuda si consideramos que “contamos con una población donde ¾ partes sufren de malnutrición, donde la mayoría es por exceso”, indica Castro.
El presidente del Colegio de Nutricionistas de Chile, Paolo Castro, llama a “recordar que la OMS dice que los carnios no tienen que tener un consumo mayor a 400 gramos semanales”.
