Un cupcake, si no fuera un cupcake, tal vez sólo sería un queque individual. Una magdalena. Un trozo de bizcocho. Pero la gracia de éstos, es que tienen formas, colores y sabores que sólo podemos lograr gracias a nuestra creatividad.
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Una de las formas más ingeniosas de hacer entretenido y sabroso un cupcake, es rellenándolo. En cada mordida, da esa sensación de que estoy comiendo algo más que un simple queque.
Mermelada, crema, manjar, nutella… O una mezcla de más de un ingrediente, o un trozo de fruta como una frutilla. Las opciones son muchas, pero acá viene la gran pregunta: ¿Cómo? ¿Cómo relleno un cupcake sin que mi queque termine convertido en miles de trozos?
En este tutorial Paso a Paso, Gourmet nos enseña cómo rellenarlos, y también nos da deliciosas ideas de rellenos. ¡Vas a ver lo fácil que es!