Durante los últimos años hemos pasado de criar animales a fabricarlos con todas las consecuencias que la producción en masa representa. El director de cine Mark Devries colocó una cámara a su dron para mostrarle al mundo lo que sucede en una granja de cerdos operada por Murphy-Brown.
Murphy-Brown es una división de negocio de granjas Smithfield, el mayor productor de carne de cerdo a nivel mundial. Lo ideal sería que un productor de este tamaño tuviera los más altos estándares de calidad, desafortunadamente, eso no fue lo que las grabaciones de Devries descubrieron.
Además de varias galerías en las que los cerdos viven hacinados y presos en sus diminutas jaulas, hay una especie de lago artificial lleno de orines y heces de los cerdos. Esta es una fosa abierta a la que llegan todos los desechos de los cerdos desde los edificios donde son criados.
Cuando la fosa se llena, el agua se drena con rociadores de agua en los alrededores. Las partículas diminutas de agua viajan con el viento hacia las comunidades vecinas provocando una peste que afecta la salud de las personas. Las enfermedades respiratorias son de las más comunes debido a esta contaminación y en los niños el asma ha incrementado.
Esto sucede no sólo alrededor de una granja sino en las casi 2.000 que hay en una estado como Carolina del Norte. Ahora imagina la cantidad de contaminación que se genera en todos los Estados Unidos. Para tomar acciones contra esto podemos esperar a que estas granjas sean clausuradas o reducir nuestro consumo de carne de cerdo, ¿cuál de las dos depende más de ti?
