Dicen por ahí, «el espectáculo debe continuar». Hace unos meses esta frase era difícil de asimilar para los empresarios circenses de la Ciudad de México. Hoy en día los circos que aceptaron los aires de cambio presentan un nuevo rostro lleno colorido, arte y fantasía, ahora sin animales.
En julio pasado, el Gobierno del Distrito Federal hizo oficial la reforma a la Ley para la Celebración de Espectáculos Públicos que prohibe el uso de animales en los circos. En un principio este gran paso para los derechos animales provocó la resistencia de los circos, algo que se transforma en increíbles y divertidos actos.
Hoy AnimaNaturalis destaca el trabajo realizado por el Circo Atayde, que ha dejado atrás las rejas y los látigos para renovarse. Así presenta un nuevo espectáculo con actos que desafían a la gravedad, malabaristas que muestran su fortaleza, atletas que danzan en las alturas y payasos que nos hacen reír con sus ocurrencias.
Con más de 126 años de tradición, el Circo Atayde da un paso importante que en un principio resistía. Además ofrece una oportunidad a cada vez más artistas circenses de formar parte de su gran familia: bailarines, contorsionistas, acróbatas, equilibristas, todos con talentos extraordinarios que sorprenderán a niños y a grandes.
Mientras tanto, tigres, leones, osos y elefantes que alguna vez vimos en estos y otros escenarios pasan un por proceso de rehabilitación antes de dirigirse a un nuevo hogar, con todas las características que requieren para llevar una vida digna.
Así como le pedimos al Gobierno prohibir los animales en el circo, así como festejamos esta reforma — no sólo en Distrito Federal, sino en todo el territorio nacional —, es hora de apoyar al patrimonio circense en México, para mantener su trabajo y conservar sus tradiciones ahora sin depender de los animales.
Los invitamos a conocer esta nueva faceta de los circos sin animales, como las Galas de Invierno del Circo Atayde y otros espectáculos que han evolucionado, para ofrecernos momentos increíbles sin necesidad de lastimar a estos hermosos seres sintientes que ahora tendrán otra oportunidad de vivir con dignidad.
