Hasta hace 4 años en la comunidad de Puerto Cabuyal, Ecuador no existía ninguna escuela. Cuando decidieron tener la primera escuela tomaban clases en una cabaña temporal pero se fue volviendo insuficiente para la cantidad de niños que acudían.
La comunidad necesitaba un nuevo espacio, pero diferente a las escuelas del sector construidas con hormigón y barrotes de acero, no funcionales para este tipo de clima y contexto, pues la comunidad se ubica en la playa, en un sitio apartado de los pueblos, siendo la pesca y la agricultura la base del sustento diario.
El diseño fue desarrollado por AL BORDE, un estudio colaborativo y experimental que se enfoca en resolver necesidades reales utilizando el material disponible, sean recursos sociales o materiales físicos.
El proyecto
El proyecto usa los mismos materiales y procesos constructivos de la comunidad. Una base de madera sobre pilotes, paredes de caña, estructura de madera y el techo tejido con paja toquilla o cade.
La conceptualización del mismo, así como el modelo y la estructura trasmiten un ambiente de frescura e imaginación que han favorecido el desarrollo de actividades artísticas y académicas de los niños.
Los habitantes de Puerto Cabuyal y demás voluntarios ayudaron a construir la escuela, que además de resolver una necesidad ha sido un motivo de unión y autoestima para toda la comunidad.