Una semana después de su intervención en las Líneas de Nazca, Greenpeace ofrece una disculpa al Gobierno peruano y asegura que participará en cualquier investigación que se realice al respecto.
Mediante un comunicado de prensa, la organización ambientalista internacional da a conocer que se ha reunido con el Ministerio de Cultura de Perú, responsable de la preservación del sitio sagrado donde decidieron enviar un mensaje de esperanza a todo el mundo, el cual se convirtió en una ofensa máxima a la zona intangible.
Sin reservas Greenpeace pide disculpas al pueblo de Perú por la ofensa causada por nuestra reciente actividad, donde dejamos un mensaje de esperanza en el sitio histórico de las Líneas de Nazca. Lamentamos profundamente por esto.
En tanto, este mismo Ministerio presentó un video donde se muestra el daño causado en las milenarias Líneas de Nazca, después que los activistas colocaron un mensaje de reflexión sobre el cambio climático. Por supuesto, sus acciones dieron mucho de qué hablar a nivel internacional, dejándolos mal parados.
Aún con las disculpas y la intención de colaborar, Greenpeace no han cooperado con cierta información que las autoridades requieren para la investigación, como nombres, pasaportes, direcciones de aquellos que acompañaron al activista argentino Mauro Fernández en la acción.
De acuerdo a la Fiscalía de Perú, este caso podría sancionarse con la pena máxima contemplada por la ley por el delito de daño al patrimonio cultural, que son 8 años de cárcel.
En el transcurso de los últimos días muchos han comentado que no se ve daño al trazo en sí, sin embargo, toda la superficie de las Líneas de Nazca ha permanecido intacto por algo.
La razón por la que no puede entrar nadie, no solamente es por el efecto duradero que tiene sino porque esta zona no ha sido íntegramente estudiada y van a ser generaciones de investigadores los que nos van a terminar de revelar todos los misterios de las líneas de Nazca, explica Luis Jaime Castillo, viceministro de Cultura.
Por lo pronto, Naidoo estará de visita en Perú para reunirse con las autoridades y encontrar una solución. Lo cierto es que las Líneas de Nazca se han visto comprometidas y no se sabe si el sitio podrá regresar a su estado anterior.
