El pasado miércoles 24 de septiembre el buque petrolero LR Mimosa derramó cerca de 22 mil litros de crudo (en un comienzo ENAP dijo que eran 3 mil litros) en la bahía de Quintero en la región de Valparaíso, debido a una falla humana.
El hidrocarburo derramado alcanzó cerca de 2 kilómetros de playa lo que ha significado la muerte de la mayoría de las especies que habitan el lugar, como peces, aves marinas y afectando los arrecifes de coral de la bahía.
Según las autoridades el incidente ha sido “controlado” por un equipo de 10 lanchas de la Armada de Chile junto a más de 80 especialistas de ENAP. Por el momento no se ha podido restablecer la actividad pesquera artesanal, lo que ha impactado fuertemente en las caletas de pescadores de Quintero, Horcón y Ventanas.
Según la ONG Oceana, la cantidad de litros derramada es evidentemente mucho mayor que la informada por la autoridad y ENAP.
“La escena que vimos no podía ser más dramática. Queremos expresar todo nuestro apoyo a la comunidad, especialmente a los pescadores artesanales, que nuevamente han visto sus recursos naturales, actividades y lugar de vida pisoteados por las empresas de la zona. Son 40 años de contaminación, agravados ahora por un derrame de petróleo”.
Oceana llama al gobierno a intervenir fuertemente para frenar la instalación de las nuevas industrias y controlar las existentes. Por su parte, el ministro del Medio Ambiente, Pablo Badenier, calificó el hecho como “daño ambiental grave”, explicando que “afecta a los recursos bentónicos (arrecifes de coral) que están en el sector”.
Especialistas de ENAP señalaron que la recuperación del ecosistema podría tardar de 15 a 20 años. Recordemos que esta es una “zona de sacrificio”, donde existe un alto nivel de contaminación generada por la División Ventanas de Codelco, la transnacional AES Gener (la misma que quiere construir la central Alto Maipo), explica el medio nacional El Mostrador.