Recientemente el Ministerio de Cultura del Gobierno de Perú anunció el comienzo de una serie de acciones judiciales para lograr el retiro de invasiones y de mineros ilegales que operan en sitios donde se encuentran las antiquísimas líneas y geoglifos de Nazca.
La medida tomada por el Ministerio de Cultura también ha sido coordinada con la Dirección Desconcentrada de Cultura de Ica y la Dirección Regional de Ica de Energía y Minas. Esta última ya ha intercedido cerrando varias plantas de procesamiento minero en las pampas de Nazca y de Jumana, clausurando varias de ellas, explica Ecoportal.
La zona protegida comprende 5.633 kilómetros cuadrados, abarcando toda la provincia de Nazca y de Palpa, y parte de la provincia de Lucanas en Ayacucho. Al ser una extensión tan grande es difícil combatir las invasiones, lo que ha provocado serios daños a este patrimonio arqueológico.