La jojoba es un arbusto originario de los desiertos de Sonora, México y Mojave en Estados Unidos. Es reconocida por sus múltiples propiedades y usos en diferentes industrias –carburantes, ceras, cosmética, biodiesel, lubricantes, ordenadores y plásticos- además de ser el único vegetal que produce cera líquida o éster.
PUBLICIDAD
El aceite de jojoba es tan versátil que se puede utilizar como producto cosmético o sustituir otros aceites de hidrocarburos con la ventaja de ser un recurso renovable. Al ser un producto tan útil, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) desarrolló tecnología que permitirá reproducir la jojoba en viveros y plantaciones semicomerciales que impulsen la productividad en zonas áridas del noroeste de México.
Una de las ventajas de esta tecnología es que se creó una variedad mejorada de la jojoba de la que se garantiza la obtención de la semilla, que es la parte útil de la planta y se podrá cultivar mediante un sistema de riego por goteo. Su producción a mayor escala tendrá como consecuencia un incremento en la producción y rentabilidad.
La planta de jojoba es dioica, es decir, existen hembras y machos, siendo las primeras encargadas de producir las semillas mientras que las segundas proveen el polen. En los viveros se sembrará la jojoba con una densidad de 1.250 plantas por hectárea, el 90% serán hembras y con ellas se producirán 450 kg de semillas anuales por hectárea.
El futuro de las plantaciones es prometedor, ya que una vez identificadas las plantas de producción alta, pueden clonarse y mejorar las cosechas con el tiempo, protegiendo así a las especies silvestres.
Además de todas las propiedades que ya mencioné, la jojoba es una de las pocas plantas que ayuda a mejorar el medio ambiente y la economía de las zonas áridas, porque demanda poco agua y se adapta muy bien a los cambios climáticos.
Fuentes: Crearán plantaciones semicomerciales de jojoba en el noroeste del país (Rotativo de Querétaro)
Simmonsdia chinensis (Wikipedia)