¿El paraíso? No, sólo un pequeño país que decidió tener la mejor política pública de 2013. Uruguay decidió ser el productor y el vendedor de marihuana, acabando con el narcotráfico y terminando con la mitología que sataniza a una planta medicinal, otorgándole criterios de salud pública.
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La fijación de precios que el Estado dispuso quedó en un dólar el gramo de marihuana, y el máximo de venta en 40 gramos al mes, para quienes estén registrados.
Aun quedan pendientes en los siguientes 120 días a contar del pasado lunes, definir qué tipo de marihuana se permitirá, las empresas a las cuales se licitará su producción y comenzar a hacer el registro de usuarios, lo que se planea estará listo a mediados de 2014.
La buena noticia es que ya se encuentra vigente el permiso de plantación hasta de seis plantas por familia, con una producción anual de 480 gramos.
Es el momento en que dan ganas de gritar ¡Grande Charrúas!