Muchas son las feministas que pregonan que no le regales una licuadora a una mujer en Navidad. A mí personalmente me haría muy feliz, aunque aclaro que no tiene que ver con que sea mujer, sino con que soy una apasionada amante de la cocina (y en la cocina, pero esa es otra historia, jeje). Si en su casa hay un chef de corazón, o un amante de la comida, estas son algunas ideas de regalos para él.
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Un utensilio sorprendente
Una vez me dieron una máquina eléctrica para hacer huevos duros, fui muy fan. Seguramente si ya le apasiona la cocina, ya tiene también las cosas básicas e incluso algunas muy elegantes, pero siempre hay novedades en este departamento: máquinas para cake pops, para helados, moldes… de verdad nos hacen felices. Una olla de cobre o un rodillo de mármol son utensilios muy elegantes y útiles que no cualquiera se puede comprar, seguro te lo echas a la bolsa con uno de esos.
Una despensa gourmet
Olvidemos los productos básicos como el kilo de arroz y el de frijoles, pero una despensa con aceite de trufa, vinagre de frambuesa, miel pura de maple, agua de rosas turca, aceitunas kalamata, especias exóticas o casi cualquier cosa que veas en el súper y te preguntes para qué sirve es lo que soñamos encontrar bajo el arbolito en Navidad. Lo bueno es que los experimenos no tardarán en aparecer y con suerte te toca probar los resultados. ¡Es una inversión!
Uno más para la colección
Tengo muchas amigas y familiares apasionados de la cocina y todos tienen una fijación: yo colecciono teteras, por ejemplo, otra del grupo tiene una seria adicción a los refractarios. Si puedes asomarte a su cocina o preguntar discretamente seguro encontrarás algo que colecciona. Mira si tiene n cantidad de delantales, tazas de medir… Si descubres que su fijación es con un ingrediente ya la hiciste. Venden por ejemplo dulces de tocino, velas con olor a tocino, pasta de dientes sabor tocino, ¿ves de qué hablo?
Tiempo
Porque muchos amantes de la cocina nos frustramos por no tener tiempo. Puedes meter en un frasco todos los ingredientes de una receta fancy de lentejas o arroz y pegar atrás una etiqueta con la receta. Cualquier cosa que pueda sólo vaciar en la olla, agregar pocos ingredientes y tener una cena increíble en 20 minutos. Aquí hay algunas ideas de lo que puedes meter en un frasco. Otras ideas: harina para pancakes con chispas de chocolate, mezclas para galletas que tú mismo saques de tu recetario preferido… Agrega un frasco con un delantal de su color preferido al lote y tienes un cocinero muy feliz.
Un libro de recetas
¡Obvio! Aunque encontremos tantas recetas en Sabrosía, el objeto en sí siempre es bonito de tener. Personalmente me gusta leerlos para inspirarme, aunque los mantengo lejos de la mantequilla y el chocolate derretido. Lo mejor es que puedes combinarlos con alguna otra pasión que le conozcas: ¿le gustan los viajes? uno de cebiches peruanos o de tapas; ¿la historia? hay varios sobre la de la cocina; si tu chef estrella es además apasionado de la literatura, el libro es la mejor opción, piensa que hay novelas que hablan sobre cocineros que seguramente lo engancharán.
Un cuaderno con tus secretos de cocina y espacio para que tome notas también le encantará.
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Cocineros famosos
Un póster con una cita de Julia Child, un muñeco de Ratatouille o del chef de los Muppets, el Cookie Monster, seguramente puedes encontrar algún artículo relacionado con uno de sus gurús para decorar su cocina. Si tienes la intención de un regalo DIY, además de lo de los frascos puedes bordarle la cita del chef para que lo cuelgue en la pared.
¡Ayudarle!
Ya casi es la cena de Navidad. Esa persona ya está seguramente metida en la cocina preparando los romeritos o el pavo mientras se hornean los pasteles y galletas. ¿Quieres regalarle una feliz Navidad? Entra ahora en la cocina a lavar platos o picar nueces u ofrécete a ir a comprar lo que se le haya olvidado y ya no tiene tiempo de buscar. Créeme, en esta época es de las mejores cosas que le puedes dar.
