Académicos mexicanos dedican sus investigaciones a encontrar alternativas al petróleo — ¡exacto!, aún cuando el gobierno insiste en su explotación —. Existen avances en las alternativas, esperando que en algún momento sean adaptables al país. Alternativas como, por qué no, bacterias que obtienen biocombustible, desarrolladas en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
PUBLICIDAD
Los investigadores de Cinvestav han identificado bacterias, del tipo celulomonas, de las cuales han creado nuevos microorganismos por medio de mutación química. Estas nuevas bacterias tienen como característica obtener enzimas, empleadas en la degradación de azúcares, de manera más rápida y de mayor calidad. El siguiente paso en el proyecto es reducir las etapas para la obtención del bioetanol por medio de procesos enzimáticos.
“Las nuevas generaciones las obtenemos tras aplicar estímulos externos químicos a un grupo de bacterias celulomonas. Lo que empleamos son luz ultravioleta, nitrosoladimina o etilmutanosulfanoto para alterar al microorganismo y hacer que produzcan más enzimas degradadoras de azúcar” ˜ Dra. TeresaPonce Noyola.
Al concluir el proyecto, estas bacterias serían capaces de producir bioetanol a partir de la degradación de azúcar. Con ello se aprovecharían los desechos agrícolas de la caña de azúcar y el agave.
Cinvestav lleva 25 años en el desarrollo de esta investigación, que busca la degradación de residuos a través de microorganismos. El proyecto es viable en pequeña escala por el momento. Aunque los microorganismos se ajustan a los estándares de calidad, no han llegado a una cantidad suficiente para una producción industrial. Además todavía faltan hacer pruebas para su implementación y alguna empresa interesada en la idea.
En tanto estos microorganismos seguirán su evolución hasta que su degradación enzimática sea optima. Mientras tanto, ¿algún interesado en biocombustible?
Link: Equilibrio
Foto: SajomaDigital
