Es curioso lo que llegamos a conocer de cerca, o eso creemos, la cocina china o la cocina japonesa, y sin embargo lo poco que conocemos o seguramente muchos de vosotros no conoce nada, de la cocina coreana. Pues bien, hoy os voy a acercar una de sus elaboraciones más básicas, se trata del kimchi.
Podríamos decir que la cocina coreana es la cocina de los fermentados. Sí, sus elaboraciones principales se consiguen gracias a la fermentación de sus ingredientes y el método más habitual de fermentarlos es con la fermentación láctica. Pues bien, con esa fermentación consiguen este plato, por lo general se utiliza la col china para hacerlo aunque se pueden fermentar cualquier verdura como por ejemplo los rábanos o los pepinos.
El origen del kimchi, así como de otras comidas que tienen su principal técnica en la fermentación, no es otra que la de conservar los alimentos durante mucho tiempo. Esto es por las extremas condiciones climatológicas de Corea. Y por lo tanto muchos alimentos se dan solo durante pocos meses al año y de ahí la necesidad de conservarlos a través de la fermentación. En especial teniendo en cuenta que no existía hace siglos otro tipo de conservación (frío, salazones, y demás).
Os podéis imaginar que al ser una elaboración fermentada es bastante fuerte de sabor y con un aspecto también un tanto extraño, especialmente a nuestros ojos que no están acostumbrados a este tipo de elaboraciones. Pero una vez que lo comemos y nos acostumbramos no será, ni por asomo, la última vez que lo hagamos. Seguro que os haréis fan de este tipo de comida.
Además el color rojo se debe a que en su elaboración se emplea un pimiento rojo picante muy tradicional en Corea. Así que, además de fuerte por la fermentación es picante y salado. A priori, todas las papeletas para que no le guste a nadie, pero todo lo contrario cuando lo probéis.
Por otro lado Corea aunque es un país pequeño tiene una orografía muy peculiar ya que tiene de todo, llanura, mar, ríos, valles, montañas, etc. Y eso hace que el kimchi no sea tratado del mismo modo por la zona donde se elabore ni tampoco por la temporada del año ni por el ingrediente con el que se elabore.
La cocina coreana, como la japonesa o china le da mucha importancia al aspecto saludable de la comida. Y el kimchi también tiene una raíz muy interesante en ese aspecto ya que se le otorgan propiedades importante como por ejemplo la de fortalecer las defensas del cuerpo, es antioxidante y ayuda a eliminar colesterol. Y todo gracias al ácido láctico, a la bactería que hace la fermentación: lactobacillus kimchii, a la vitamina C, A, b1, B2, carotenos, proteínas, calcio y carbohidratos.
Así que solo quedaría hacerlo un día en casa. Ya tengo la receta preparada, y en cuanto consiga unos ingredientes que me faltan la haré y la postearé
