El origen de este cóctel fresco y salado, que tienen tantos fanáticos en el mundo es incierto. Se dice que fue inventado por un barman llamado Fernand “Pete” Petiot, cuando este trabajaba en el famoso Harry’s New York Bar en París a comienzos de los años ’20. Luego de la prohibición del alcohol en Estados Unidos, Petiot habría viajado a Nueva York donde trabajaba en el King Cole Bar del Hotel St.Regis y durante ese tiempo agregó al cóctel la mezcla de jugo de tomate más una serie de condimentos como rábano picante (horseradish), salsa de Tabasco, jugo de limón y sal de apio. Y así nació este clásico.
Uno de los atractivos de este trago es que no parece propiamente un trago, ya que no es tan fuerte, por eso es uno de los preferidos para acompañar un tardío desayuno de domingo o un almuerzo. Además, la mezcla de jugo de tomates y diversas especias y condimentos, permite a cada barman amateur jugar con sus propios gustos. Incluso alguna gente le agrega jugo de algunos mariscos, como almejas.
Para que los disfrutes este domingo, o cualquier otro día, acá te dejamos la receta:
Ingredientes:
- 2 onzas de Vodka
- 4 onzas de jugos de tomate
- Jugo de limón (0,25 onza)
- Salsa Inglesa o Worcestershire (3 chorritos)
- Salsa de Tabasco (2 chorritos)
- Rábano picante o Horseradish (1/4 de cucharadita)
- Una pizca de sal de apio.
- Sal y pimienta
- Decoración: Rodaja de limón y tallo de apio.
Preparación: Poner en un vaso alto el vodka y el jugo de tomate. Luego agrega los demás ingredientes. Puedes ir variando la cantidad según tu gusto. Llena con hielo y agita para combinar todos los elementos. Para finalizar, decora con el limón y el trozo de apio, que también sirve como agitador.
Si quieres ver más, te dejamos un video:
Fuente: “Behind the Drink: The Bloody Mary” (Liquor.com)