En los arrecifes de coral del atolón de Tabuaeran en el centro-oeste del Océano Pacífico, el pez nocturno -con grandes ojos para ver de noche- se aventura cada vez más a salir de día. ¿Puede ser la causa de esto la pérdida de depredadores producto de la pesca?
Según una investigación publicada por PLoS ONE, la sobrepesca ha saqueado y despojado al atolón de muchos de sus depredadores más notables, como tiburones y barracudas, provocando un efecto dominó a través de todo el ecosistema. Uno de los cambios emergente parece ser que, con menos miedo a ser devorado, los peces nocturnos están cada vez más dispuestos a salir durante el día.
“Hemos encontrado que en los arrecifes, los depredadores diurnos han sido pescados de manera muy fuerte, por lo que especies nocturnas son más abundantes durante el día. Este aumento en la abundancia ha sido más pronunciado en las especies de peces con ojos muy grandes en relación a su cuerpo”, señaló el autor principal del estudio, el Dr. Douglas McCauley de la Universidad de California en Berkeley.
Dado que la pesca a gran escala no comenzó en el atolón de Tabuaeran hasta la década de 1980, McCauley y sus colegas se sorprendieron de que este cambio en el comportamiento se arraigara en tan sólo 30 años.
“Este es un lapso muy corto de tiempo en relación con el largo tiempo de evolución que le lleva a estas divisiones nocturnas/diurnas en establecerse”, agregó el científico.
Puedes leer el estudio en el siguiente enlace.
Fuente: Nocturnal Fish Take Back the Day (Ecology)