Hace unos días os hice una especie de tartar de salmón con un toque asiático y ya entonces os contaba que es un tipo de preparación que me encanta para el salmón. Es un pescado perfecto para preparar de esta forma, dada su suavidad y su textura.
PUBLICIDAD
Pues bien, hoy he querido preparar la receta clásica de tartar de salmón, de la que pueden derivar todas las demás. En esencia se trata de acompañar el salmón crudo de unos ingredientes de guarnición y de unos ingredientes de sazonamiento. En origen estos derivan de los mismos con los que se prepara el steak tartar clásico y vienen a ser cebolleta o cebolla tierna, pepinillo, alcaparras y por otro lado salsa worcester, tabasco, sal y yema de huevo que le aporta cremosidad y unión al plato.
En conjunto es un plato muy vistoso, tal vez para servir más como aperitivo que como plato principal dado a que puede cansar un poco si se come mucha cantidad.
Tiempo de elaboración | 20 minutos
Dificultad | Fácil
Personas | 4
Ingredientes
- 300 g de salmón fresco (mejor si es lomo)
- 1 cebolleta pequeña
- 50 g de pepinillos
- 30 g de alcaparras
- 2 yemas de huevo
- 1 cucharada de worcester
- Tabasco al gusto
- Sal
Cómo hacer tartar de salmón clásico
Empezamos picando bien finos los pepinillos, las alcaparras y la cebolleta. Lo reservamos.
Continuaremos limpiando el salmón de piel y espinas. Las espinas que tiene son grandes y están todas en linea, así que se sacan fácilmente. Después lo picamos con el cuchillo.
PUBLICIDAD
Seguimos añadiendo los ingredientes de sazonamiento. Esto es muy al gusto de cada uno, a mi me gusta picante así que le añado alguna gotita de tabasco adicional. Añadimos la sal y mezclamos bien.
Emplatamos con ayuda de un aro de emplatar. Dejaremos un hueco más hundido en el centro para poner la yema de huevo. Os he pu esto dos en los ingredientes, la otra sería para la otra mitad del tartar que emplateremos de la misma forma.
Consejos y sugerencias
Las claves para preparar un buen tartar de salmón no son otras que ser extremadamente limpio en su elaboración, y además respetar en todo momento la temperatura. Debemos hacerlo en frío y además, si es posible, servirlo sobre hielo picado, en especial si estamos en una época con mucho calor.
Después lo que os he comentado al principio. Intentar buscar un maridaje entre los ingredientes de guarnición que le añadamos, sean estos u otros, con los ingredientes de sazonamiento y aderezo. De esta forma podremos hacer mil recetas diferentes de tartar de salmón.