Conocemos de sobra cómo afecta la vida del hábitat y las personas y animales cuando una termoeléctrica se encuentra cerca. Es por eso que pescadores artesanales, recolectoras de algas y residentes de poblaciones cercanas de Coronel, en el sur de Chile, decidieron realizar una acción peligrosa y desesperada: Tomarse la chimenea de la central a carbón Bocamina II de Endesa a eso del medio día de ayer martes hasta hoy miércoles 6 de junio.
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Tras ocho horas de temeraria manifestación, la empresa del rubro energético que además posee el 51% de las acciones de HidroAysén y que recientemente ha dicho públicamente que no retirará inversión en territorios chilenos pues se sienten “cómodos”, solicitó a Carabineros desalojar sus dependencias, pero esto no aconteció por lo que los tres audaces pobladores se encuentran soportando bajas temperatura a una altura no despreciable de 80 metros, como también las descargas tóxicas para pedir que se les de solución a sus demandas.
Si la empresa no está dispuesta a asumir la paralización de la termoeléctrica, solicitan que por lo menos se les de un desalojo digno en donde el avalúo de sus propiedades pueda mitigar el impacto en sus vidas del “progreso”.
Paradojalmente esto comenzó el Día del Medio Ambiente…lo que nos lleva a reflexionar cuanto hay que avanzar para celebrar con ganas esta importante fecha para que el futuro de nuestro planeta, que se construye día tras día, sea más verde.
Fuente: Endesa pide desalojar a manifestantes que “se tomaron” la chimenea de termoeléctrica en Coronel (Bío-Bío)
