“Tu estás enfermo” o “estás loco” o “ya estás otra vez”. Estas frases son las que he tenido que aguantar alguna vez cuando saco el móvil en medio de una comida para hacer una foto al plato y compartirlo en twitter o facebook a través de Instragram u otras aplicaciones. Y es que el fénomeno de las redes sociales unido a una pasión como es la gastronomía nos puede llevar a disfrutar de una buena comida de una forma diferente al resto.
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Lo cierto es que los smartphones nos ayudan a, no solo estar más conectados los unos con los otros y acceder a redes sociales. Si no que nos otorgan el poder de tener más información y de forma más rápida. ¿No os ha pasado alguna vez que alguien os ha preguntado cómo ir a algún restaurante? ¿Y qué habéis hecho vosotros? Yo al menos, sacar el móvil y buscarlo en google maps.
En otras ocasiones se trata de buscar un tipo concreto de restaurante, o incluso escribir opiniones sobre lo que estamos comiendo y llegar a debatir sobre un plato con alguien que lo probó en otra ocasión pero que no está en ese momento contigo. Locuras, pero locuras reales y que cada día más gente comparte.
La infografía que os traigo lo demuestra, aunque la verdad que está hecha entre usuarios de las redes sociales. Tal vez si se hiciese a pie de calle, la cosa cambiaría algo, pero lo seguro es que cada vez somos más los fooddies locos por hacer fotos y compartirlas.
Los datos están ahí. El 20 % de los usuarios que usan el Smartphone cuando planean una comida lo hacen para hablar con sus amigos de las redes sociales sobre sus planes.
Mientras están comiendo, un 24% tienen como principal objetivo hacer fotos. Un 19% lo notifica en el estado de Facebook y un 18% utilizan aplicaciones para hacer check-in en el restaurante.
Pero es que después de la comida todavía seguimos compartiendo cosas. Un 22% habla sobre la comida en Facebook, un 22% quiere volver a casa y vuelve a usar el teléfono para hacerlo y un 14% sube las fotos que hizo mientras comía.
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En fin, si todavía no has descubierto el placer de compartir lo que comes con tus amigos de las redes sociales, te estás perdiendo algo muy grande. ¿A qué esperas?
