Nadie sabe que lo más complejo del derretimiento de los polos, además de las graves consecuencias del alza del mar y las inundaciones que se darán pie si eso sucede, es que en el permafrost (o hielos milenarios) se almacena, en sus capas superiores, grandes cantidades de CO2 y metano, dos de los gases más contaminantes.
Se cree que, sólo el permafrost de Siberia, contiene quinientos millones de toneladas de CO2, es por eso que se hace sumamente preocupante que esta parte del planeta sufra el deshielo, además de que puede inundar zonas que hoy se encuentran pobladas.
Pero la liberación de estos gases, no sólo queda a cargo del calentamiento global, sino también todo tipo de manipulación de esta parte del orbe. Por ejemplo los científicos que cavan para encontrar fósiles o semillas de plantas milenarias.
Imaginen si una mega petrolera, se le ocurre perforar el Ártico para sacar el tóxico hidrocarburo. Nada más que horror, no solo para los animales que ahí habitan: osos polares, morsas, ballenas francas y otros en peligro de extinción, sino que para todo ser viviente del resto del planeta.
Esto es lo que pretende hacer Shell en el Ártico, ya que el presidente Obama ha dado el visto bueno para perforar en busca de petróleo durante el verano del hemisferio norte, lo que podría liberar 11 millones de toneladas de contaminación de carbono. Además, si hubiese un derrame bajo las capas de permafrost, sería absolutamente imposible limpiarlo.
Es por eso que Biological Diversity se encuentra haciendo una campaña para que le envíes un mensaje al presidente Obama, con el fin que desista del permiso otorgado a Shell. ¡¡Participa!!
Fuente:
SAY NO TO DESTRUCTIVE DRILLING IN THE ARCTIC (Biological Diversity)
Una capa del subsuelo milenaria (Aprende Gratis)
