Un gran grupo de argentinos de distintos pueblos han bloqueado caminos y realizado una serie de protestas en favor del medioambiente.
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La minería genera millones dólares a los países que la explotan, pero el impacto ambiental de algunos proyectos genera la destrucción de lugares invaluables, además de no representar un verdadero avance en términos de recursos para las comunidades que sufren de los embates de la explotación.
De esto se estás dando cuenta millones de personas alrededor del mundo y cada día son más.
Famatina es un pequeño pueblo de 6.500 habitantes, ubicado en el extremo norte de la provincia de la Rioja. A pesar de ser un poblado pequeño, logró frenar un mega proyecto minero de la minera canadiense Osisko, que pretendía extraer oro por 30 años y generar 25.000 millones de dólares. Esto demuestra que la participación ciudadana y las movilizaciones por una buena causa, pueden tener resultados satisfactorios, aunque se pelee con el enemigo más fuerte del mundo: El vil dinero.
“Queremos evitar que se devaste cielo, agua y tierra. Queremos vivir tranquilos, con nuestras fuentes de agua. Una provincia minera como Catamarca sigue siendo de las más pobres del país, pero nosotros no queremos ni el 1% ni el 100% de los beneficios de la minería” sostuvo Carina Díaz Moreno, líder de la movilización en Famatina.
Hace un mes que cerca de 5 mil fanatimeños se turnan para bloquear el paso de camiones a las montañas, el compromiso del pueblo y la constancia fue tal, que pronto se unieron los poblados vecinos, desde Buenos Aires miles de argentinos mandan todo su apoyo, e incluso se grabó un video con artistas y famosos que se unen a la protesta.
En la Rioja, capital de la provincia, marcharon 10 mil manifestantes contra el proyecto, pese a que el 30% de los ingresos de este se quedarían el el distrito.
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Cerca de 1.936 millones de euros ha generado la inversión minera en Argentina. Por ello, tiene grandes defensores; El gerente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros, Damián Altgelt, apoya enfáticamente su sector argumentando que: “Los antimineros dicen que usamos cifras de agua que estremecen, pero solo usamos el 3% de lo que usa la agricultura”.
Aun así, es sabido que la minería se apodera casi por completo de los recursos hídricos de a zona donde se realicen las faenas. Por ello “las comunidades dicen que pueden vivir sin oro, pero no pueden vivir sin agua”. Un pensamiento tan lógico para muchos que es incomprensible para otros pocos.
Fuente: Protestas en Argentina contra la minería por el impacto ambiental (El País)