Junto a la idea de que la primavera se adelante, postales mentales de paisajes embellecidos de flores y vegetación concurren también en el mismo imaginario. No obstante, la idea no es tan agradable, sobre todo para las especies marinas, quienes ante la velocidad del cambio climático, deben adaptarse o extinguirse.
Un estudio de un grupo de científicos del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), han calculado por primera vez la velocidad del cambio climático y su efecto sobre las estaciones. De acuerdo a la explicación del equipo, la velocidad media a la que avanza el cambio climático es 27 kilómetros por década.
El artículo publicado en la revista Science precisa, con respecto a las estaciones que, la señal térmica que marca el inicio de la primavera se está adelantando unos dos días cada diez años.
El trabajo determina que la velocidad global del cambio climático es un factor que establece cómo se distribuyen las especies y cómo cambian su hogar perseguidos por la variación de las condiciones de vida. Además, el artículo indica que los regímenes térmicos, marcados por el modo en que se distribuyen las temperaturas en una determinada zona, se han desplazado hacia latitudes más altas: 37 kilómetros por década en el hemisferio norte y 17 km por década en el sur, a una velocidad media de 27 km / década.
Los científicos han medido los cambios térmicos a partir de análisis de las temperaturas superficiales globales de los últimos 50 años, para concluir que los gases de efecto invernadero han calentado los ecosistemas terrestres aproximadamente un grado desde 1960.
Este calentamiento se ha producido tres veces más deprisa en tierra que en el océano, lo que ha obligado a las poblaciones a adaptarse o a cambiar su distribución continuamente para mantenerse en el mismo régimen térmico. Para alterar su fenología, las especies emplean otras técnicas además de desplazarse, es decir, en el momento de la reproducción o la puesta de huevos.
Según explica Johnna Holding, investigadora en el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, un centro mixto del CSIC y la Universidad de Baleares, en cualquier zona presenciaremos a una redistribución de las especies, no obstante “las especies del Ártico no tienen sitios más fríos a los que migrar. Algunas, como las del Mediterráneo, no pueden migrar hacia el norte porque el mar está cerrado por Europa”, agregó.
La investigación señala que las poblaciones simplemente necesitan moverse para escapar al cambio climático, pero se asume que en el océano, las rutas de escape son más complejas y a veces inexistentes. “Hemos observado que en los océanos las únicas opciones para la vida marina son adaptarse o dejarse llevar por las corrientes calientes”, asegura la científica del Commonwealth Scientific and Industrial Research Organisation (Australia) Elvira Poloczanska.
El estudio forma parte de un programa internacional para evaluar los impactos del cambio climático sobre los ecosistemas marinos. Está financiado por el Centro Nacional de Síntesis y Análisis Ecológicos, de la National Science Foundation y la Universidad de California en Santa Bárbara (EE UU).
Fuente: “El comienzo de la primavera se adelanta dos días cada época” (ABC)