En 2017 nos sorprendimos con el capuccino con glitter y el helado con glitter, pero la creatividad de los cocineros amantes del brillo, no terminó ahí, pues un bar londinense desarrolló una salsa con brillos que acompaña sus platos.
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La idea fue de los chefs de Fox under the hill, de Hungry Horse, restaurante en el que se ofrece una salsa de glitter para mejorar sus preparaciones navideñas durante el mes de diciembre, según relata The Sun.
Hasta ahora no hay mayor explicación del por qué utilizar brillo comestible en la cocina y puede que se trate de un intento por mejorar la realidad, o por amor a los unicornios, lo que sí sabemos es que en 2018 no pasará de moda.
