Los duques de Sussex, Meghan Markle y el príncipe Harry, acudieron este martes a la exposición que conmemoró el centenario del nacimiento de Nelson Mandela en el Southbank Centre de Londres.
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La famosa pareja llegó a la plaza que se encuentra por fuera del recinto entre una gran expectación y una vez dentro fueron recibidos por las voces del coro Ubunye reunidas por el Southern Africa Trust especialmente para la ocasión, una actuación que los duques han escuchado al lado de Zamaswazi Dlamini-Mandela, nieta de Nelson Mandela.
Luego, los duques recorrieron el Queen Elizabeth Hall para disfrutar de una exposición que narró la vida y lucha de Nelson Mandela (1918-2013), un largo viaje que comenzó en su juventud y que terminó con la conquista de la libertad.
El político sudafricano, que estuvo encarcelado durante 27 años, inspiró un movimiento internacional contra del sistema opresivo del apartheid y es de una de las figuras claves del siglo XX.
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De esta manera se reencontraron con el enorme legado del político, filántropo y activista sudafricano al que Diana de Gales tanto admiró.
Así se conocieron la princesa Diana y Mandela
Nelson Mandela y Diana de Gales se conocieron en 1997, seis meses antes de que la princesa muriera. En ese año, el último en la vida de Diana que comenzó en agosto de 1996 con la firma de su divorcio de Carlos de Inglaterra y terminó en agosto de 1997 con su fallecimiento en un accidente de coche en París, la Princesa había visitado Angola para promover la eliminación de minas antipersona y dos meses después regresaría a África para encontrase en Ciudad de Cabo con el entonces Presidente de la República de Sudáfrica. Un encuentro que daría la vuelta al mundo.
A pesar de su delicado estado de salud, el político viajó al Reino Unido en el año 2002 para participar en una conferencia organizada por la Fundación en Memoria de Diana Princesa de Gales, en Londres, viaje que aprovechó para visitar su tumba en Althorop, donde depositó una corona de flores blancas.
“Me quedé hundido cuando me enteré de su muerte, por eso el hecho de estar aquí hoy, diciéndole adiós, es para mí algo muy significativo y que nunca olvidaré. Ella me produjo una impresión tremenda y es así como hoy la recuerdo”, afirmó entonces Mandela.
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