Desde finales de los 90, La Oreja de Van Gogh marcó una era en la música pop en español. Con letras cargadas de nostalgia, romanticismo y sensibilidad, la banda se convirtió en una de las más queridas y exitosas tanto en España como en América Latina. Su sonido característico y la inconfundible voz de Amaia Montero los catapultaron al estrellato con himnos generacionales como La playa, Cuídate o Rosas. Por eso, cuando en 2007 Amaia anunció su salida para iniciar una carrera como solista, el público no tardó en preguntarse si el grupo sobreviviría al cambio.
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La respuesta llegó con Leire Martínez, una joven cantante que, aunque enfrentó un mar de críticas y escepticismo al principio, logró ganarse el cariño del público con su propio estilo. Su debut con el emotivo tema Jueves fue un golpe certero que demostró que La Oreja de Van Gogh tenía aún mucho que ofrecer.
Sin embargo, las comparaciones entre ambas vocalistas nunca cesaron. Durante 17 años, Leire convivió con esa dualidad: ser admirada por muchos, pero también constantemente medida con una vara ajena.
En octubre de 2024, la banda anunció que Leire abandonaba la agrupación. El comunicado oficial fue breve, pero dejó entrever tensiones internas: “La decisión ha sido dura y difícil, pero llega después de mucho tiempo de reflexión y profundas conversaciones en las que no hemos conseguido acercar nuestras diferentes maneras de vivir el grupo”.

Así, se cerraba un ciclo lleno de éxitos, pero también de silencios incómodos y heridas no sanadas.
Ahora, Leire rompe ese silencio y, con su primer sencillo en solitario, lanza un contundente mensaje que los fans interpretan como el cierre que merecía.
Leire rompe el silencio y habla claro
En su reciente entrevista con David Broncano para La Revuelta, Leire no sólo presentó su nuevo single Mi nombre, también abrió su corazón. “No fue mi decisión. A mí me hubiera gustado darle una vuelta”, confesó. Según explicó, los cuatro músicos de la banda decidieron su salida sin consultarla directamente. Desde entonces, no ha vuelto a hablar con ellos. “Todavía a veces conecto con el enfado, pero en general estoy mucho más tranquila”, agregó. Y, entre bromas, dejó claro que ni indemnización ni despedidas cordiales hubo: “Ojalá. Ni cesta de Navidad me va a llegar”.
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Más allá del adiós forzado, la artista reveló el impacto emocional que vivió tras el anuncio: fiebre, vómitos y una fuerte reacción física al verse fuera de un proyecto que defendió durante casi dos décadas. Sin embargo, encontró en la música un refugio y motor para reinventarse: “Ahí dije ‘se acabó la tontería, vamos a salir adelante y a escribir canciones’”.
Un mensaje directo para Amaia Montero
Uno de los momentos más comentados de la entrevista fue cuando Broncano le preguntó sobre Amaia Montero. Aunque aclaró que nunca fueron amigas, sí han coincidido en varias ocasiones. Y lejos de alimentar una rivalidad, Leire se mostró conciliadora: “Amaia, si me estás viendo, te quiero mucho y si quieres, nos cantamos lo que quieras, cuando quieras”, dijo mirando directamente a cámara.

La exvocalista también se pronunció sobre las comparaciones que ambas han sufrido a lo largo de los años, especialmente por parte de los medios. “Desde la perspectiva del machismo, se han dicho cosas muy feas sobre nosotras. No es justo”, señaló tajante. Aseguró que los integrantes de la banda no fueron responsables de esos titulares hirientes, sino quienes los escribieron: “Ese balón no les corresponde a ellos”.
El cierre de un ciclo y el inicio de otro
Ahora, Leire ha presentado su primer tema en solitario, titulado Mi nombre, con el cual marca el inicio de una nueva etapa en su carrera musical. Con este lanzamiento, la cantante deja claro su mensaje: “Búscate a alguien que me sustituya, ya lo hiciste una vez”.
A pesar del dolor que pudo haber causado su salida, Leire se despide con madurez y fuerza, afirmando que “Ella (Amaia) es La Oreja de Van Gogh y será La Oreja de Van Gogh toda la vida, igual que yo. Lo que hemos vivido no lo puede borrar nadie”. Con autenticidad, Leire demuestra que ya no es “la que sustituyó a Amaia”, sino una voz propia que ahora escribe su historia, sin sombra alguna.