Después de un retraso debido a los incendios en Los Ángeles, las nominaciones a los 97º Premios de la Academia fueron anunciadas la mañana del jueves, con Emilia Pérez, The Brutalist y Wicked acaparando varias categorías. Sin embargo, hay una película que está tomando gran fuerza y que está amenazando a las ya favoritas para llevarse varios premios, entre ellos Mejor Película y Mejor Actriz. Esta obra ha cautivado a la crítica y al público por igual, gracias a su enfoque audaz y una protagonista que se ha ganado el reconocimiento por su actuación desgarradora e inolvidable.
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A medida que la temporada de premios avanza, todo parece indicar que esta película tiene el potencial de sorprender y desbancar a las favoritas de la temporada.
Anora: La película nominada al Oscar que ha cautivado a todos
“Anora” es una de esas películas que ves sin saber qué esperar y te deja sin palabras. Esta obra dirigida por Sean Baker, el aclamado cineasta detrás de Tangerine y The Florida Project, ha causado sensación en la temporada de premios, con Mikey Madison brillando en un papel principal que la ha llevado a ser una fuerte contendiente al Oscar.
La trama nos presenta a “Ani” (Anora), una trabajadora sexual en Nueva York, que vive una vida que no es ni trágica ni idealizada, como suele ocurrir en muchas películas sobre el tema. Ella no es una víctima, sino una mujer que ha encontrado su lugar en un mundo marginal, luchando con su independencia y autodefinición sin caer tampoco en los clichés de mujer empoderada.
La película da un giro cuando “Ani” conoce a Ivan, un joven millonario ruso, quien la introduce en un mundo de lujos y promesas que despierta en ella la esperanza de una realidad diferente. A medida que la relación se desarrolla, los contrastes entre su vida anterior y la nueva, llena de fiestas y excesos, se vuelven cada vez más evidentes.
Sin embargo, lo que podría parecer un cuento de hadas moderno, pronto muestra su lado oscuro. Como en toda historia de fantasía, el futuro de Anora parece prometedor, pero el filme nunca permite que la audiencia se olvide de que, en su mundo, todo tiene un costo.
El director maneja con maestría el tono de la película, alternando entre momentos de comedia y una sensación de melancolía y de inminente tragedia que persiste en todo momento.
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Mikey Madison brilla en el papel de una mujer compleja
Lo que realmente distingue a Anora es el tratamiento de la protagonista. A diferencia de películas como Pretty Woman, que presentan una visión romántica y simplificada del trabajo sexual, Anora ofrece una representación más cruda y realista. La figura de “Ani” no es una heroína perfecta ni una víctima, sino una mujer compleja que, aunque anhela mejorar su situación, no busca ser rescatada.
Mikey Madison, quien la interpreta, ofrece una de las actuaciones más sorprendentes del año, siendo una de las grandes favoritas para el Oscar a Mejor Actriz, con el potencial de desbancar a la propia Demi Moore. La actriz, conocida por su trabajo en Once Upon a Time in Hollywood y el reboot de Scream, tomó clases intensivas de ruso y de pole dance para dar vida a una interpretación convincente.
Un final que ha puesto a todos a reflexionar (Spoilers)
El final de Anora es, sin lugar a dudas, uno de los aspectos más comentados de la película. Sin dar demasiados spoilers, es justo decir que no es el tipo de desenlace feliz que muchos podrían esperar. En su lugar, la cinta opta una conclusión ambigua que deja al espectador con una sensación de incertidumbre y pesar. Este giro es, en muchos sentidos, el corazón de la película: un recordatorio de que no siempre hay finales felices, especialmente en un mundo donde el poder, el dinero y la corrupción juegan un papel tan importante.