Desde su reciente estreno en Netflix, la serie Me haces falta ha logrado cautivar por completo a los espectadores en todo el mundo con una adictiva historia llena de drama, suspenso y romance.
A lo largo de cinco episodios, la producción sigue a Kat Donovan, una detective que sufrió una gran decepción amorosa cuando su prometido Josh desapareció de su vida y nunca más supo de él.
Unos once años después, Donovan decide volver a buscar el amor a través de una app de citas en donde encuentra el perfil de su expareja y se derriba toda la estabilidad que había logrado construir.
“La reaparición de Josh la llevará a ahondar en el misterio que rodea la desaparición de su propio padre y a descubrir secretos del pasado que han estado enterrados por décadas”, reza la sinopsis.
A causa de los temas tan universales que aborda la trama de la miniserie británica, muchos creen que podría estar basada en hechos, pero la realidad es que el proyecto es completamente ficticio.
La producción es una adaptación de una novela superventas homónima (Missing You, por su título original) de Harlan Coben. No obstante, la historia tiene sus raíces en la vida real del famoso autor.
El hecho real que inspiró la serie Me haces falta
En una entrevista con MailOnline, el escritor contó que la inspiración para crear Me haces falta nació de ver a sus amigos de mediana edad recién divorciados y buscando pareja en apps de citas.
Coben entonces se cuestionó qué sucedería si una persona que acabó su compromiso haciendo ghosting reapareciera como potencial pareja en una aplicación para hallar el amor años después.
En cuanto al proceso creativo, el artista que lleva casado casi 40 años confesó haberlo escrito como acostumbra: teniendo claro el resultado, pero sin saber exactamente cómo terminar en ese punto.
“Es como el parto”, explicó al medio. “Lleva unos nueve meses y la mejor parte es la idea, la parte más difícil es el final”, ilustró el autor que gusta escribir en prácticamente cualquier sitio donde pueda.
“Mi proceso es seguir cambiando procesos. Hago lo que funciona hasta que deja de funcionar. Es como si tuviera que salir corriendo. Encuentro un caballo. Lo monto tan fuerte como puedo. Se derrumba. Busco un caballo nuevo. Cualquier cosa que me haga ponerme a escribir es buena”, dijo.
Con respecto al título de la historia, el también productor de la serie reveló que viene de la canción Missing You (1984) de John Waite, quien está más que encantado con ese detalle, según contó.
