El pasado 28 de noviembre, el mundo del entretenimiento mexicano despidió a Silvia Pinal, una de sus más grandes leyendas. A sus 93 años, la diva dejó un legado inolvidable en el cine, teatro y televisión, pero también un profundo vacío y cabos sueltos en una familia marcada por tensiones y conflictos públicos.
Muchos fans creían que por fin se produciría la reconciliación entre Alejandra Guzmán y su hija, Frida Sofía, tras años de distanciamiento pero las cosas parecen seguir tensas entre ambas. Los rumores de una posible reunificación comenzaron a circular cuando la rockera confirmó que su hija había tenido la oportunidad de despedirse de su abuela, y que ambas habían tenido un contacto a través de una videollamada. Sin embargo, lo que en un inicio parecía ser un primer paso hacia la paz familiar se desmoronó rápidamente tras la ausencia de Frida Sofía en el homenaje póstumo de la actriz en Bellas Artes, y mucho más con el contundente mensaje que la joven dejó en redes sociales.
¿Qué provocó el distanciamiento madre e hija?
El distanciamiento entre Alejandra Guzmán y Frida Sofía comenzó hace más de tres años y se intensificó cuando la hija de la joven reveló que había sido víctima de abuso sexual por parte de su abuelo, Enrique Guzmán. Estas acusaciones generaron una división profunda dentro de la familia, con la mayoría de los miembros de la familia Pinal defendiendo al patriarca. La Guzmán, en particular, expresó en su momento que “metía las manos al fuego” por su padre, desestimando las revelaciones de su hija y minimizando el trauma.
En medio de este conflicto, Frida Sofía también compartió detalles sobre su salud mental, revelando que había sido diagnosticada con Trastorno Límite de la Personalidad (TLP), un trastorno caracterizado por inestabilidad emocional, impulsividad y dificultades en las relaciones interpersonales.
La cantante explicó que este diagnóstico se debía a un incidente traumático que Frida vivió a los 12 años, cuando sufrió un intento de secuestro, y que desde entonces ha estado recibiendo tratamiento para su bienestar emocional.
Durante una conferencia de prensa que los hermanos Pinal ofrecieron, la cantante declaró: “(Frida Sofía) es parte de la familia, tiene los apellidos y tiene la sangre, como no lo voy a compartir con ella, yo soy su madre. Yo perdí a mi madre y ella es sangre de la sangre. Es nuestra familia y la queremos, cómo no lo vamos a compartir. Ella se despidió, tuvo esa suerte, tuvo ese derecho”.
Ahora todo parece haber quedado desmentido por la propia Frida, quien ha compartido una serie de imágenes en sus redes sociales, con fuertes mensajes.
Frida Sofía mantiene distancia con su madre
“No se puede perder algo que nunca se tuvo”, señaló Frida en una de sus publicaciones.
“Vivir con el monstruo que llevamos dentro es un arte, pero dejarlo ir cuando lo necesitas y poder encerrarlo después de que termina su trabajo… eso es una obra maestra”, se lee en otro mensaje.
En un segundo, habla sobre poner límites. “En realidad es sano que le caigas mal a la gente, eso significa que no eres alguien complaciente y que tienes límites. Muchos de tus problemas se deben a que no pones a las personas en su sitio la primera vez que te ponen a prueba. Ten cuidado con lo que toleras, estás enseñando a los otros cómo deben tratarte”.
Frida Sofía ha dejado claro que seguirá priorizando su bienestar emocional y manteniendo límites firmes, incluso frente a su propia familia. Sus publicaciones reflejan una determinación por sanar a su manera, lejos de las expectativas o presiones externas.