Después de más de una década de espera, Wicked finalmente llega a la gran pantalla, y lo hace con una majestuosidad que supera todas las expectativas. Y es que si bien adaptar uno de los musicales más icónicos de Broadway no era tarea fácil, el director Jon M. Chu no sólo logra honrar la puesta teatral, sino que la eleva a una experiencia que todos deben vivir en pantalla grande.
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Basada en la novela de Gregory Maguire Wicked: Memorias de una bruja mala, reimagina la emblemática historia de L. Frank Baum, El Maravilloso Mago de Oz (1900), y el clásico cinematográfico El Mago de Oz. La historia se centra en Elphaba (interpretada por Cynthia Erivo), una joven de piel verde que ha sido marginada toda su vida, y la encantadora y hermosa Glinda (interpretada por Ariana Grande), quien siempre ha sido amada por todos.
Ambas, que podrían parecer destinadas a ser rivales por ser completos opuestos, desarrollan una amistad inesperada que desafía los prejuicios y expectativas de la mágica tierra de Oz.
El casting dio mucho de qué hablar desde el anuncio de la película, pero finalmente Erivo y Grande demuestran con creces que han sido la elección perfecta para encabezar la adaptación.
Por un lado, Erivo, con su intensidad actoral y su voz prodigiosa, captura con gran maestría la lucha interna y la determinación de Elphaba mientras que Grande, brilla como Glinda, aportando un carisma encantador y un impecable sentido del humor que inyecta frescura y ligereza a la historia, sin perder la profundidad emocional de su papel
Juntas, logran una química tan genuina y poderosa que no sólo mantiene la esencia del musical, sino que la expande, haciendo que su amistad traspase la pantalla como se ha visto a lo largo de la gira promocional.
Jonathan Bailey, por su parte, no sólo hace alarde de su carisma y galanura, sino que también demuestra su talento actoral y vocal al dar vida a Fiyero, un joven despreocupado y encantador cuya conexión con ambas brujas resulta fundamental para el desarrollo de la trama. Michelle Yeoh y Jeff Goldblum también merecen una mención especial pues aportan una presencia magnética como Madame Morrible y Oz, respectivamente.
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Un mundo visualmente cautivador
Wicked es un espectáculo visual que nos transporta al vibrante y misterioso mundo de Oz. Con sets que requirieron hasta 20 semanas de construcción, la producción no escatimó en detalles como los millones de tulipanes reales que fueron sembrados para dar vida al paisaje o la creación de una marioneta gigante para la imponente presentación del Mago de Oz. Eso sí, aunque por momentos es inevitable pensar que el CGI en ciertos elementos desentona con las escenas, finalmente es una experiencia que equilibra a la perfección lo teatral y lo cinematográfico.
La música, como era de esperarse, es el alma de esta producción y el cast la lleva a otro nivel con números grabados en vivo que la dota de una calidad orgánica y emocional que no siempre se encuentra en las adaptaciones cinematográficas de musicales. Desde la abertura No One Mourns The Wicked, hasta Dancing Through Life y Popular, y por supuesto, el icónico tema Defying Gravity, la película entrega momentos que erizan la piel.
¿Spoiler alert? Erivo brilla especialmente en este último, llevando la emblemática canción a nuevas alturas tanto literal como figurativamente.
Por cierto, parte de la magia también está en los guiños y referencias al universo de Oz y algunos de ellos prometen hacerte gritar si eres fan ¡así que presta mucha atención!
Una adaptación que honra a sus protagonistas y el legado de Oz
Más allá de los colores brillantes y los paisajes deslumbrantes, Wicked ofrece una reflexión profunda sobre el poder de las elecciones y cómo estas moldean nuestras vidas y relaciones. La dinámica entre Elphaba y Glinda no sólo es el corazón de la historia, sino que también desafía el cliché del “bien contra mal” que suelen predominar en los cuentos de hadas.
Se trata de una visión liberadora sobre dos protagonistas que representan a dos mujeres complejas, valientes y, sobre todo, capaces de escribir su propia historia, más allá de las etiquetas.
Sin duda Jon M. Chu ha logrado algo extraordinario: una película que captura la esencia de lo que hizo al musical un fenómeno y le da un nuevo aire, haciéndolo accesible tanto para los fanáticos de toda la vida como para quienes se acerquen a esta historia por primera vez.
La cinta llega a la pantalla grande este 21 de noviembre en su versión original pero también podrá disfrutarse al español con las voces de Danna y Ceci de la Cueva, protagonistas de la puesta teatral en México.
Aunque dividir la adaptación en dos partes podría parecer tedioso, especialmente por el cierre que tiene, la decisión parece buscar replicar la experiencia teatral, sólo que con un intermedio de un año, según la fecha prevista para el estreno de la segunda parte.