A lo largo de su exitosa trayectoria artística, la actriz Charlize Theron ha encarnado con absoluta maestría diferentes papeles que han tenido que afrontar circunstancias traumáticas y dolorosas.
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Sin embargo, Theron no solo ha vivido momentos angustiosos en la piel de personajes. En la vida real, la estrella vive marcada por la noche en que su mamá mató a su padre en defensa propia.
El día en que la madre de Charlize Theron mató a su padre
En una entrevista hace varios años atrás, la ganadora del Oscar recordó aquel trágico día cuando su progenitor, Charles Theron, murió herido por una bala disparada por su madre, Gerda Maritz.
La estrella contó que su papá era alcohólico y su conducta destructiva estaba encauzada hacia ella y su mamá. “Mi padre era un hombre muy enfermo: era él o nosotras”, dijo a National Public Radio.
“Fue alcohólico toda su vida. Siempre estaba borracho. Era una situación desesperante porque es totalmente impredecible el día a día con un adicto”, confesó en la charla, según recogió La Nación.
La intérprete sudafricana luego compartió los eventos que acontecieron poco antes de que Maritz disparara fatalmente a Theron por la seguridad de ambas durante la noche del 21 junio de 1991.
“Mi padre estaba tan borracho esa noche que casi no podía mantenerse en pie cuando entró a la casa con una pistola. Mi mamá y yo estábamos en mi habitación”, narró en la conversación.
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“Cuando vimos que venía directo a nosotras, cerramos la puerta y nos apoyamos las dos sosteniéndola desde adentro para evitar que entrara”, relató. El acto enfureció a su padre.
Y es que, al ser incapaz de abrirla, jaló el gatillo y disparó tres veces a la puerta. “Ninguna de esas balas nos impactó, lo cual es un milagro”, reconoció Charlize tras recordar el violento suceso.
“Nos decía que iba a entrar y que nos iba a matar a los dos. Mi madre logró recuperar el arma y le disparó”, contó. Tras ser impactado por una bala, Charles Theron falleció esa noche a sus 44 años.
Después de lograr comprobar que disparó en defensa propia, Gerda fue absuelta y pudo comenzar una nueva vida junto a su hija, quien tenía tan solo 15 años de edad cuando vivió el traumático episodio.
“Este tipo de violencia que ocurre dentro de una familia es algo difícil de charlar, pero creo que al decir lo que me pasó les hago saber a otros que no están solos y que lo más importante de todo esto es entender la gravedad de las adicciones”, finalizó.
