Un video viral en TikTok ha generado la reapertura de una investigación policial en Estados Unidos.
La usuaria Katie Sentry subió un video el 30 de septiembre de 2024, en el que relataba cómo encontró una alfombra enterrada en el jardín de su casa mientras realizaba trabajos de construcción.
Este descubrimiento despertó la curiosidad y teorías de sus seguidores, quienes especulaban sobre la posibilidad de que un cuerpo estuviera escondido en la alfombra.
Presión de las redes
A medida que el video ganó popularidad, muchos usuarios sugirieron que la policía debería investigar el hallazgo.
Aunque Sentry contactó a las autoridades, los agentes inicialmente no mostraron interés en destinar recursos, argumentando que la situación no era clara. Dejaron en manos de Sentry la opción de excavar por su cuenta si deseaba seguir adelante.
Dado lo complicado que resultó excavar la alfombra, Katie decidió pedir ayuda a través de sus redes para conseguir herramientas o perros rastreadores que pudieran ayudar en la investigación.
El 3 de octubre, la policía acudió nuevamente, esta vez acompañada por perros especializados en la detección de cadáveres. Según reportes, los animales mostraron señales de que había restos humanos en el lugar.
El 4 de octubre, los detectives realizaron una excavación completa en la propiedad de Sentry. Para sorpresa de muchos, la investigación no reveló ningún cuerpo en el lugar.
Katie, aliviada pero aún confundida, compartió la noticia con sus seguidores en TikTok, aclarando que solo se encontró una alfombra con goma. A pesar de esto, el misterio de por qué los perros reaccionaron y quién rompió su computadora sigue sin resolverse.
La rápida viralización del caso demuestra cómo las redes sociales pueden influir en las autoridades y reavivar casos policiales. Aunque no se encontró evidencia de un crimen, la historia refleja cómo la presión pública puede tener un impacto significativo en las investigaciones.