El distanciamiento entre el príncipe William y su hermano menor, el príncipe Harry, ha crecido notablemente en los últimos años. Este tipo de tensiones familiares es precisamente lo que Kate Middleton desea evitar a toda costa en la educación de sus hijos.
Y es que a pesar que la princesa Diana hizo lo mejor que estuvo en sus posibilidades para criar a sus dos retoños, fruto del matrimonio con el príncipe Carlos, la futura reina consorte de Reino Unido busca crear lazos más fuertes en sus tres hijos, incluso a prueba de los devenires de la realeza.
Así es como Kate Middleton estaría educando a sus hijos
El príncipe y la princesa de Gales están buscando una forma diferente de criar a su familia, con el objetivo de que la historia no se repita entre los hermanos George, Louis y Charlotte en el futuro.
Según la experta en realeza, Jennie Bond, citada por Vanidades, han optado por una crianza “mucho más cercana y normal”, lo cual es un enfoque moderno en comparación con lo que se ha visto en la historia de la familia real británica.
“Está muy bien repetir el mantra real de que el ‘deber’ es lo más importante. Pero si se pregunta a la gente ‘normal’ cuáles son sus prioridades, no me cabe la menor duda de que casi el cien por cien de las personas diría que la familia. La familia es lo que cuenta por encima de todo”, expresó Bond.
Esto resuena con la visión que Kate y William tienen para sus hijos: priorizar el bienestar familiar sobre los rígidos protocolos que han marcado a la realeza, ya que presuntamente el futuro rey estaría muy dolido por lo sucedido con Harry.
La difunta reina Isabel II asumió enormes responsabilidades a una edad temprana, y tanto el rey Carlos III como la princesa Diana lidiaron con las tensiones en su matrimonio, lo que impactó a sus hijos, William y Harry. Kate, en cambio, busca ofrecer a sus tres pequeños una infancia “feliz y estable”, algo que ella sí tuvo.
Para ello, Kate Middleton ha incorporado con sus hijos un enfoque más tierno y comunicativo en su crianza, lo cual incluye nunca gritar, siempre escuchar las quejas e inquietudes de sus hijos y permitirles expresar sus sentimientos, aseguran.
