Kate Middleton ha logrado convertirse en una de las máximas figuras de la realeza británica, pues pese a no haber nacido siendo real, ha estado a la altura de cada uno de los compromisos en los que ha acompañado a su esposo el príncipe William desde su noviazgo.
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Su belleza, estilo y lealtad la han llevado a ser de las mujeres más queridas del Reino Unido y ahora que enfrenta una lucha contra el cáncer son muchos los mensajes de apoyo y consideración que ha recibido.
Sin embargo, no todo ha sido color de rosa tras su llegada a la monarquía y una de sus mayores preocupaciones en sus inicios fue su fallecida suegro, la princesa Lady Di, a quien no tuvo la oportunidad de conocer tras haber fallecido en 1997.
El temor de Kate Middleton por Lady Di
El nombre de Lady Di siegue siendo replicado a nivel mundial pese a que han pasado 2e años de su fallecimiento. La princesa logró ganarse el corazón de todos gracias a la cercanía que manejó con el pueblo y sobre todo entre los más necesitados.
Su carisma, empatía, belleza y estilo la llevaron a marcar un legado que se convirtió por muchos años en la sombra de Kate Middleton, pues temía ser comparada constantemente con su suegra al ser la próxima en convertirse en la princesa de Gales.
Recordemos que aunque Camila Parker logró casarse con el Rey Carlos III cuando este aun tenía su título del príncipe de Gales, ella pasó a ser la Duquesa de Cornualles en lugar de ser conocida como la princesa de Gales.
Middleton llegó a considerar el seguir sus pasos para evitar el pesado nombre de princesa de Gales, según reveló Robert Jobson, experto en realeza, en su nuevo libro dedicado a la futura reina de Inglaterra.
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“Kate sabía que inevitablemente sería comparada con Diana, cuya prematura muerte causó mucho dolor y tristeza en el mundo. Y tenía razón”, escribió Jobson.
Las conversaciones entre los seguidores y los distintos miembros de la realeza sobre las diferencias entre ambas llegó a causar gran nerviosismo en Kate, sin embargo, ella logró salir adelante y enfrentar su realidad, resultando ser bastante favorecedora, pues ha ocupado su logar como princesa de Gales de la mejor manera.
Habría sido su esposo quien la convencería de tener confianza en ella y en su postura como realeza.