Kate Middleton y el príncipe William son una de las parejas más comentadas al tratarse de los futuros reyes de Inglaterra, por lo que su relación ha estado en el ojo público desde sus inicios. Aunque en los últimos años han enfrentado distintos rumores de infidelidad por parte del hijo del Rey Carlos III, ellos siguen adelante con la familia que han formado.
No todo ha sido color rosa en el romance entre los príncipes de Gales, incluso desde sus inicios, ante la presión que significa ser parte de la realeza, pero si algo ha quedado claro es que Kate ha sabido como codearse entre los miembros reales al punto de convertirse en una de las más admiradas y respetadas.
Si bien ahora, Middleton es todo un icono de la moda y referente de la elegancia, en sus años universitarios no todo era glamour al tratarse de una chica común y corriente, por lo que cuenta con varias anécdotas que actualmente no son bien vistas dentro de la royal family.
Kate Middleton y el disfraz de la venganza contra el príncipe William
Kate Middleton y William se conocieron en la Universidad de St Andrews y tras un tiempo siendo amigos le dieron riendas sueltas al amor, sin embargo, en medio de su noviazgo, el príncipe decidió cortarla por teléfono pidiéndole tiempo para pensar sobre dicha relación, lo que los alejó por un tiempo.
Lejos de hundirse en depresión y despecho, la ahora futura reina de Inglaterra, decidió ponerse guapa e irse de fiesta junto a su hermana Pippa Middleton, pero no se trató de cualquier fiesta pues la monarca fue fotografiada luciendo un sensual disfraz de conejita Playboy con el que buscaba vengarse del real.
Aunque no han aparecido imágenes de dicho momento, la información ha sido dada a conocer por Robert Jobson, el escritor que está lanzará este 1 de agosto ‘The Princess of Wales, the Biography’, el nuevo libro sobre la princesa, el cual promete dar de qué hablar. Para ello ha revelado algunos detalles en entrevista con el Daily Mail.
Según el autor, William cambió totalmente de parecer al ver a su pareja de tal manera, por lo que se dio cuenta que ella era el amor de su vida y la reconciliación llegó más tarde, en una neuva fiesta de disfraces en donde la princesa asistió caracterizada de enfermera, dejando cautivado a su ahora esposo y padre de sus hijos: George, Charlotte y Louis.