Este 29 de mayo fue un día bastante agridulce para la actriz Maribel Guardia. Celebró un año más de vida, pero tuvo que hacerlo sin la presencia de su único hijo, Julián Figueroa. Es el segundo que celebra así. Sin embargo, a pesar de la tristeza que pudo sentir, no dudó en honrar su existencia y darle la bienvenida a los 65 años.
La artista compartió con su nieto, nuera, esposo, familiares y amigos. Lució estupenda con un outfit total white, compuesto por un pantalón ajustado, un brasier decorado con flecos y detalles en plateados, y un saco también son adornos plata. El look lo completó con unos stilettos. Se veía estupenda, fresca, tranquila, cómoda y divina. No aparenta su edad, parece tener el elixir de la juventud.
Sin dudas, que ver este atuendo marcó sus curvas, que son envidiadas por más de una mujer mucho más joven que ella. Ha asegurado que su cintura de avispa y la gran silueta que tiene la ha logrado, en parte, a su genética, y también con ayuda de muchos ejercicios y buena alimentación. No ha negado que se sometió a varias cirugías, pero solo en la cara y el pecho.
Maribel detalló que se retocó la nariz y también los senos, tras dar a luz a Julián. La actriz contó al programa “Hoy día” que ella mantiene su abdomen envidiable gracias a los 400 abdominales, aproximadamente, que hace a diario, combinado con sentadillas y elevaciones de piernas.
Hace ocho años manifestó a “Dímelo Cantando”, que la actitud es muy importante en la vida, y acotó que “lo mejor para que los abdominales funcionen, es hacer primero una caminata o trote corto para luego enfocarse en el abdomen, porque es cuando quemas más grasa en el estómago”.
Sugirió empezar la rutina, aunque sea, con cuatro series de 20 o de 10, y “luego van a ver cómo cada vez tienen más fuerza en el estómago y van a poder hacer más. Tengo muy buena genética, pero también tengo muy buenos hábitos”. Confesó que no come arroz, pan ni tortillas. Hay gente que se come el arroz, el pan, las tortillas y el chocolate.
En relación con la alimentación también explicó: “Me desayuno mi jugo de limón con una cucharadita de bicarbonato, con eso empiezo el día. Es maravilloso y me hace sentir muy bien. También tomo dos cucharadas de linaza con agua. La linaza por la fibra y me mantiene muy bien la flora intestinal, desinflamada y te ayuda a ir al baño, pero de forma natural sin dañar tu estómago”.
La avena no falta en sus comidas y la toma con leche de coco o almendras, porque la llena y satisface. Para el almuerzo, a veces, ingiere salmón con ensalada y si decide comer carbohidratos, solo toma uno: una tortilla de maíz o una rebanada de pan con fibra. Y en la noche, atún con una galleta sin calorías.