Pese a todos los rumores que siempre circulan en los medios internacionales y en las redes sociales, la pareja conformada por Kate Middleton y el príncipe William es una de las más sólidas dentro de la realeza europea.
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Sin embargo, en los primeros días del romance de la pareja real, William dejó a su novia Kate llorando después de que canceló sus planes festivos en el último minuto, por lo que no se vieron durante los días de Navidad y Año Nuevo.
La complicada primera Navidad y Año Nuevo de Kate y William
La biógrafa real Katie Nicholl, en su libro de 2011 The Making of a Royal Romance, dio a conocer detalles inéditos del primer año de los príncipes como pareja.
“En noviembre de 2006, justo antes de que William se graduara de Sandhurst, Kate fue invitada a Sandringham para el tradicional almuerzo navideño de la familia real, la primera vez que era novia había recibido tal invitación”, señaló la autora en el texto.
Sin embargo, pese al estatus que le daba la invitación, Kate declinó dicha opción ya que decidió pasar las vacaciones de Navidad con su familia.
Eso sí, el príncipe había prometido previamente que él asistiría a pasar Año Nuevo con ella y su familia. Pero nada de eso aconteció.
“El escenario difícilmente podría haber sido más romántico [y] Kate esperaba ansiosamente su llegada. En el último momento, William cambió de opinión y decidió quedarse con su propia familia. Informó a una Kate llorosa durante una conversación nocturna en el Boxing Day sobre el cambio de plan”, detalló la escritora.
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“Para William no fue gran cosa, pero para Kate la cancelación fue una señal de que algo más siniestro vendría. William había tenido dudas y se sentó con su padre y su abuela para tener una discusión franca sobre su futuro con Kate. Ambos le aconsejaron que no se apresurara a nada”, aseguró la autora.
Así que en ese instante, mientras los medios de comunicación se centraban en la pareja y la posibilidad de un compromiso, Kate y William enfrentaban una crisis a la distancia.
Finalmente, los problemas fueron superados y en la actualidad siguen juntos como familia, con sus tres hijos y William siendo un pilar fundamental con Kate, especialmente luego que la princesa anunciara hace unas semanas que se encontraba en tratamiento contra el cáncer.