La rivalidad entre Camila Parker y Lady Di sigue siendo de las más sonadas al tratarse de la princesa más querida y la actual reina consorte de Inglaterra, quien mantuvo un idilio amoroso con el ahora Rey Carlos III, mientras él estaba casado con la madre de sus hijos.
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La infidelidad entre los actuales reyes es un tema que muchos seguidores de la casa real británica aun no les perdonan, debido a las mentiras y humillaciones en la que dejaron envuelta a Diana Spencer, quien falleció en un trafico accidente de tránsito en 1997.
Parker no solo se encargó de hacer acto de presencia en la boda de Diana y Carlos el 29 de julio de 1981, en la catedral de San Pablo, sino que también tuvo un detalle desagradable que aseguran que lo hizo para opacarle el día a la princesa de Gales, pero años después la reina se encargó de “vengarse”.
El gesto con el que la reina Isabel II vengó a Lady Di
Camila Parker llegó a la boda de quien era su amante luciendo un vestido blanco, pese a que las reglas de estas ceremonias es no llevar este color, para no robarle protagonismo a la novia. La situación habría hecho molestar a Diana, quien incluso fue captada durante su caminata mirando a su rival.
El gesto de la consorte fue replicado en su boda con Carlos III en 2005 cuando nada más y nada menos que la reina Isabel llegó vestida de blanco con un vestido estilo Chanel, por lo que aseguran que se encargó de vengar a Lady Di al regresarle el gesto, aunque esto se trata de una simple teoría.
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Para la ceremonia, Camila evitó lucir de blanco por lo que se le vio con un vestido camisero plateado y un tocado a juego.
El romance entre Camila y Carlos se dio mucho antes que este conociera a Diana, sin embargo, ella no estaba dentro de la lista de mujeres que se podía casar con el heredero a la corona, por lo que su historia de amor se vio truncada y él fue obligado a casarse con Spencer, aunque mantuvo sus encuentros a escondidas con su ahora esposa, por lo que en una entrevista la llamada princesa del pueblo aseguró que en su matrimonio siempre fueron tres, al quedar Camila en el medio.