El talento se hereda y no hay mejor ejemplo de eso que Fiona Palomo. La hija de los actores Eduardo Palomo y Carina Ricco decidió seguir los pasos de sus padres en el medio hace más de una década.
Desde entonces, la joven de 25 años no solo ha logrado convertirse en uno de los talentos jóvenes más prometedores de México, sino también brillar en la industria de la televisión hollywoodense.
- Te puede interesar: Eduardo Palomo: fotos que confirman que fue el galán de telenovelas más guapo de todos
¿En dónde ha actuado Fiona Palomo, la hija del actor Eduardo Palomo?
La hija mayor del fallecido protagonista de Corazón salvaje nació el 12 de octubre de 1998 en México. A raíz de la vocación de sus papás, creció en un hogar lleno de pasión por las artes escénicas.
No obstante, más allá de la influencia de sus padres, descubrió tener vocación innata por la actuación desde temprana edad. A pesar de eso, no comenzó su carrera sino hasta su adolescencia.
“Yo creo que es algo que de pronto puedes traer como ser porque desde chiquitita o sea tenía como dos años y veía como el cine en blanco y negro y me clavaba horas y era repetirlo y entonces luego ya me ponía disfraces”, contó en una entrevista al programa De primera mano.
Fiona Alexa debutó como actriz encarnando el papel de Vivi San Román en la serie Gossip Girl: Acapulco en 2013. En ese entonces, tenía alrededor de 15 años y sorprendió con sus dotes artísticos.
Sin embargo, tras su estreno actoral, se enfocó en prepararse como intérprete y no volvió a las pantallas sino hasta cinco años después convertida en una mujer de 20 años guapa y talentosa.
El rol con el que retomó su carrera fue el de Amy Rodriguez en la película televisiva estadounidense Cagney and Lacey (2018). Desde ese momento, ha estado imparable actuando en México y EE. UU.
En la pantalla chica, se ha dado a conocer encarnando diferentes papeles en otros cuatro proyectos: La Negociadora (2020), Torn from Her Arms (2021), Control Z (2020-2022) y Outer Banks (2023).
Por otro lado, en el cine, Fiona tuvo su debut interpretando a Aline Barrera en ¡Qué despadre! (2022). A partir de ese hito, ha encantado con su talento y profesionalismo en otras cuatro películas.
Nada que ver (2023), Camino a Belén (2023), Un actor malo (2023) y El Roomie (2024) han sido los largometrajes en los que ha participado la heredera del don de Eduardo Palomo, según IMDb.
Sobre el legado de su padre, quien murió en 2003, aseguró al programa ya citado que guarda pocos recuerdos sobre él, pero ha podido seguir conociéndolo por las personas a las que marcó.
“Es muy bonito porque toda la gente que he conocido me platica de él y siempre tiene algo bonito que contar. Entonces es como seguir aprendiendo de él y conociéndolo a través de la gente”, dijo.
Además de ser una estrella en ascenso, Palomo también es modelo y una celebridad en Instagram, en donde comparte todo sobre sus proyectos y aficiones y presume su belleza a más de 600 mil seguidores.
