La boda de Michelle Salas se ha convertido en una de las más comentadas de la farándula, no sólo por lo ostentosa que fue entre vestidos de lujos y en un lugar de ensueño en La Toscana italiana sino por la polémica que ha rodeado a su familia por años.
Michelle es hija de Luis Miguel por lo que siempre se supo que se hablaría inevitablemente de ello. Y es que durante mucho tiempo, ‘El Sol’ no la había reconocido como su hija pues había sido fruto de una aventura con Stephanie Salas de la cual nunca se hizo cargo. Fue hasta hace unos años que este comezó a forjar una relación padre e hija con Michelle. Con el tiempo, el cantante se volvió un pilar para ella y sin rencores de por medio, lo invitó a su boda y hasta caminó de su brazo hacia el altar, según reportó la periodista Flor Rubio.
La presencia del cantante sin duda sorprendió a todos, incluso a la misma Michelle y su familia. Este llegó acompañado de su pareja Paloma Cuevas, quien siempre ha sido muy cercana a Michelle.
Esto también marcó el reencuentro con Stephanie, quien rompió el silencio respecto a la actitud que tuvo Luis Miguel durante la boda.
El gesto con el que Luis Miguel mostró su lado más humano
Este ha sido un gran año para Luis Miguel, entre su regreso a los escenarios, el amor de Paloma Cuevas y el fortalecimiento de la relación con su hija. ¿Cómo estuvo en la boda?
Según un reporte de la revista Quién, el cantante y su pareja se sentaron en la misma mesa en la que estaba Stephanie Salas con su pareja, Humberto Zurita.
“Durante la fiesta, Michelle y Danilo compartieron su mesa con Luis Miguel y Paloma Cuevas, Stephanie Salas y Humberto Zurita, los papás del novio y Eugenio López, gran amigo de la novia y de su familia”, se lee.
El intérprete de Ahora te puedes marchar no sólo llegó para estar ahí como un invitado más sino que según ha trascendido, sí bailó un vals con su hija y se mostró siempre muy feliz de verla de novia.
Según Univisión, Luis Miguel disfrutó de la fiesta como nunca se le había visto y se la pasó conviviendo con los novios, además que en ningún momento intentó ser el protagonista ni robarle la atención a su hija en su día.
Michelle Salas dijo estar feliz de haber estado acompañada de su papá y su mamá. ” Acompañada de mis papás, mi hermana (Camila Valero), familiares y la familia que escoges. Hoy puedo decir sin duda hay que tener cuidado con lo que uno desea, ya que, si de verdad quieres algo y luchas por conseguirlo, los sueños se hacen realidad”, dijo a Vogue.