Christina Aguilera siempre ha sido un ícono de la moda pero ésta vez, aumentó el glamour para una velada muy especial. La cantante, junto a su prometido Matthew Rutler, organizó el evento Climate Reality Project en el que se discutió la necesidad urgente de abordar el cambio climático y el poder de la acción colectiva para crear un futuro más sostenible para las generaciones venideras. “Mantengamos la conversación, mantengámonos informados y tomemos medidas para proteger nuestro planeta”, señaló en una publicación en Instagram.
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Si bien la intérprete de Genie in a Bottle fue muy aplaudida por alzar la voz sobre temas que nos preocupan a todos, también dejó a todos boquiabiertos con su aspecto.
Ataviada con un sensual y ceñido vestido de terciopelo amarillo de Vivienne Westwood, Christina se pavoneó con su esbelta y trabajada figura, además de mostrar partes de su mansión en Beverly Hills como el vestíbulo, el área del bar y la sala de estar de su casa de $10 millones, luciendo increíblemente hermosa.
En el clip se escucha el tema It Don’t Mean A Thing (If It Ain’t Got That Swing) de Lady Gaga y Tony Bennett, lo que hizo que muchos pidieran a gritos que Aguilera hiciera la secuela de Burlesque, cinta que protagonizó en 2010 junto a Cher.
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La transformación de Christina Aguilera
Este año la cantante tuvo una transformación de pies a cabeza que se hizo evidente cuando volvió a ingresar como juez en el reality show The Voice. Por supuesto todos señalaron que se trata de una pérdida de peso significativa pero que se nota que ha estado bien asesorada y trabajando en mejorar su salud física.
Esto sorprendió especialmente porque si bien siempre muy muy delgada, su embarazo, los estragos después de dar a luz, ver por su hija y los altibajos hormonales la llevaron a un inveitable aumento de peso. Esto no impidió que siguiera mostrándose sexy, ni que se dejara de los señalamientos pero siempre luchó por recuperar la figura que la caracterizó en los noventa.
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Un divorcio también la marcó, afectando su salud física en 2010. En una entrevista con Marie Claire, Christina dijo: “No me peso. Lo que le queda bien a una persona puede no verse bien en otro tipo de cuerpo. Resulta que tengo mucha confianza en mi propia piel. Se necesita tiempo para llegar a ese lugar. Pero se trata de abrazarte a ti mismo y a tu tipo de cuerpo”.
Desde entonces fue un viaje para recuperarse hasta que finalmente comenzó a ver los frutos de su disciplina.
Además de comer alimentos saludables y seguir tres comidas balanceadas y dos refrigerios nutritivos, evitó por completo los alimentos procesados y los refrigerios no saludables como parte de su plan de dieta y controló sus porciones de alimentos para lograr la transformación de su cuerpo. Christina también empezó a hacer ejercicio. Se tomó un tiempo para perder peso de manera saludable siguiendo una rutina de ejercicios diaria adecuada.
El impacto detrás del vestido amarillo de Christina Aguilera
El color amarillo simboliza felicidad, energía, calidez, crecimiento y optimismo. Después de todo, es el color del sol. Tiene una conexión con nuestra creatividad, fuerza de voluntad y sentido de identidad. El amarillo representa esperanza, intelecto y espontaneidad. De hecho, sólo ver el color amarillo a veces puede hacerte sentir feliz.
Vestir de amarillo puede simbolizar cambios felices y positivos en lo que respecta a la riqueza, el estatus y cómo nos perciben los demás aunque también a veces en cómo nos vemos a nosotros mismos.