La adolescencia es una de las etapas más complejas en el desarrollo del ser humano, porque va construyendo el autoconocimiento, ser originales, vivir nuevas experiencias y se definen los intereses y gustos. Además, la relación con los padres comienza a cambiar, mientras que se afianzan con sus amigos. Es por esto, que criar durante esta etapa resulta tan rudo para muchos padres y, actualmente, la actriz Geraldine Bazán está aprendiendo a hacerlo.
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Bazán junto a es expareja, el actor Gabriel Soto, se comparten la crianza de sus dos hijas: Elissa Marie, de 14 años, y de Alexa Miranda, de 9 años. Pero ahora están en el desafío de darle todas las herramientas a su primogénita para que sea una gran mujer y ante esto la actriz confiesa que no sabe cómo hacerlo, aunque va ensayando y errando en el camino de la maternidad.
Este miércoles 21 de junio compartió con sus seguidoras que también son madres un consejo vital: “¡Qué importante es dedicarle tiempo de calidad a cada uno de nuestros hijos de manera individual! La plática fluye de manera distinta y, por lo tanto, la comunicación.
Las madres drenaron sus vivencias en la publicación e, incluso, se apoyaron entre ellas para llevar una mejor relación con sus hijos.
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Este compartir de madre e hija se produce un día después de que la artista llegó de Marruecos, donde pasó unas vacaciones con sus amigas. A su llegada al aeropuerto en México, este 20 de junio, conversó sobre cómo trata de educar a Elissa en su etapa de adolescente:
De alguna mera me voy a comodadno a los tiempos que están acordados y aprovecho para cuadrar mis cosas de trabajo y claro que siempre es dificil las extraño muchisimo. se puede decir que es uno de lso beneficios del divorcio. Usa la comunicación para fijar los límites entre lo que es bueno y malo.
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“Con comunicación y confianza, que ellas se sientan que con el diálogo puedan preguntar y platicar de todo, y los limites suponen eso. Con amor y ejemplo. (...) Yo le digo a Elissa: ‘Mi amor, no sé ser madre de una adolescente. Tú estás aprendiendo a vivir y yo a ser una mamá de adolescente. Pero allí vamos agarradas de la mano y me voy a equivocar, pero estamos aprendiendo a comunicarnos”, expresó la protagonista de novela al ser abordada por los medios de comunicación.
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Además, acotó: “Creo que hay más conciencia y más guías para una paternidad, en el que se respeta la autonomía de cada niño, su forma de ser, que un hijo no es igual al otro, que son distintos y no puedes manejar las coas igual que al otro”.
Geraldine manifestó la importancia de conocer a cada uno de los hijos y que se debe tener un límite como padres para no caer en la rigurosidad y que la comunicación se cierre: “Nadie sabe ser papá, lo vamos aprendiendo en el camino, pero con dialogo y amor todo se puede”.