El amor entre los actores Itatí Cantoral y Eduardo Santamarina solo duró cinco años. El matrimonio que lo unió en 1999 se acabó en el 2004, pero dejó dos grandes amores, los gemelos José Eduardo y Roberto. Ellos rehicieron sus vidas amorosas con quienes trajeron al mundo a dos niñas, casi al mismo tiempo.
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Itatí inició su vida al lado del productor colombiano Carlos Cruz y en el 2008 contrajeron nupcias. Ese mismo año, el 9 de octubre, nació la pequeña María Itatí, quien comenzó a convivir al lado de sus dos medio hermano y con el transcurrir del tiempo mantuvo contacto con el padre de los gemelos: Eduardo Santamarina.
La estrella de “Yo amo a Juan Querendón” conoció en el set de grabación de esa novela a Maryrín Villanueva, de quien se enamoró perdidamente y se casaron marzo en el 2009. Fruto de su amor, cuatro meses llegó al mundo la dulce Julieta el 18 de julio.
La relación entre Itatí y Eduardo siempre fue armoniosa por el bienestar de sus hijos, quienes hoy ya tienen 22 años. Y el compartir de los chicos con sus medias hermanas hizo que entre las dos jovencitas, María Itatí, de 14, y Julieta, de 13, naciera una incondicional amistad, al punto de que ambas estudian en la misma escuela.
María Itatí incursionó en el modelaje al ser la imagen de la línea de ropa “Maldita lisiada”, que diseñó la intérprete de Soraya Montenegro con la Fundación Origen. En tanto, Julieta se mantiene fuera del foco del entretenimiento, ya que la mayor parte de su infancia ha estado luchando para hacerle frente a una enfermedad congénita llamada dismetría de extremidades inferiores.
La chica ha sido sometida a varias operaciones para tratar de igualar el largo de sus piernas. Sin embargo, de este tema poco se sabe, ya que sus padres lo han mantenido en reserva.
La relación de las adolescentes es tan estrecha que Itatí manifestó este jueves 15 de diciembre al programa Venga la alegría, que su hija piensa que ellas son medias hermanas.
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”Julia es mi fascinación y Maria Itatí es su mejor amiga y, además, dice: ‘Nosotras como somos medias hermanas...’. Yo nunca le confesado que no son. No digan nada. Pero mi hija jura que Julia es su hermana”, manifestó la villana de las novelas en el programa Venga la alegría.
Itatí, Eduardo y Mayrín han demostrado su madurez emocional al mantener una relación muy cordial y saludable, en el que son como una gran familia. Recientemente, la hija mayor de Mayrín, Romina, se reencontró en Nueva York, Estados Unidos con los hijos Eduardo, quienes estaban de paseo junto con su madre.
Cantoral afirmó que siente un especial respeto por Mayrín, a quien calificó de excelente ser humano y aseveró que no sabría qué hubiera hecho si Eduardo se hubiera casado con una mujer que maltratara a sus hijos.
