Recientemente Violeta Isfel alegró a sus fans al confirmar que iba a contraer matrimonio civil con su pareja, Raúl Bernal. Así lo hicieron el pasado martes 29 de noviembre en la Ciudad de México, uniendo a familiares y amigos para celebrar su amor.
PUBLICIDAD
En definitiva, este es un gran triunfo para la actriz, quien no solo le dio el “sí quiero” a su hombre soñado, sino que demostró que siempre es posible salir de las relaciones tóxicas que solo nos aportan infelicidad.
Ella es ejemplo en sí misma de fortaleza y resiliencia, pues antes de conseguir a su príncipe azul, le tocó tropezarse con una expareja que durante bastante tiempo la maltrató, humilló y hasta amenazó, conviviendo con un clima de violencia psicológica nada sencillo.
Rommel Ramírez, padre de su hijo Omar, fue su primera relación seria cuando todavía era muy joven y a quien le dejó pasar muchas cosas por la inexperiencia y el miedo. Él tenía problemas con el alcohol y una vez hasta intentó golpearla, que fue cuando dijo “suficiente” y empezó a armar su plan de salida.
“El niño no tenía derecho de llorar en la madrugada porque entonces se despertaban todos y armaban un desmadre y a la que regañaban era a mí”, relató en el pasado.
“Empezaron muy lindos (su familia), pero ya después yo era la chacha. Yo estaba limpiando y chacheando aunque estaba embarazada. Lavar, planchar, sacudir, barrer, sacudir, trapear, la ropa de todos”, agregó.
Incluso, en una oportunidad su ex se hartó de oír al bebé llorar y casi lo saca al patio de noche y mientras lo estaba lloviendo, cuestión que despertó todas sus alarmas.
Ahora, Violeta Isfel dejó ese gris episodio de su vida atrás y obtiene un esperanzador final feliz para todas las mujeres víctimas de algún tipo de violencia en una relación.
Aunque no fue sencillo, nos inspira a creer en un mejor mañana y en que si priorizamos siempre nuestro amor propio y bienestar emocional, siempre podremos darle la vuelta hasta a las circunsancias más adversas de la vida.
