Blonde, la cinta de Marilyn Monroe dirigida por Andrew Dominik, llegó a Netflix con gran fuerza sin embargo, las opiniones han estado divididas. Protagonizada por Ana de Armas la cinta ha advertido que no es una biografía, sino un relato ficticio basado en la novela de Joyce Carol Oates.
La intención es plasmar las teorías de conspiración y de explotación comercial que hubo detrás de su estrellato, así como la dualidad de una mujer consciente de ser un personaje en el escenario que no es real y que cuando se baja de este es Norma Jeane. “Marilyn Monroe solo existe en la pantalla”, dice Ana de Armas en la piel de una Marilyn atormentada y exhausta.
Uno de los grandes escándalos que rodeó a Marilyn fue su relación con los Kennedy
En la película, Johnn F. Kennedy hace que los agentes del Servicio Secreto lleven a Marilyn a su habitación para un momento de placer como si fuese una muñeca sexual, algo que ha sido muy cuestionado por los espectadores.
Históricamente ha habido muchas especulaciones sobre el papel que jugó Monroe en la vide del ex presidente de los Estados Unidos. Los rumores de un romance se acrecentaron cuando ella le dio una serenata deséandole “Feliz cumpleaños” mientras usaba el famoso vestido ceñido de brillantes.
Esto sucedió ante los ojos de todos en el Madison Square Garden durante una gala de recaudación de fondos en 1962.
Jerry Blaine, un exagente del Servicio Secreto durante la presidencia de Kennedy, le dijo a People que estaba con este cuando interactuó con Monroe en la casa de Peter Lawford (cuñado del presidente) en Santa Mónica en 1961 y también cuando se reencontraron en una fiesta en Nueva York. Sin embargo, Blaine aseguró quie nunca estuvieron solor y que no hubo evidencia de una aventura aunque nunca supo “qué pasó a puerta cerrada”.
Por otro lado, Tony Oppedisano, amigo y road manager de Frank Sinatra, quien también era cercano tanto a Monroe como a JFK, declaró: “Obviamente fue algo sexual, y esperaría que hubiera sentimientos de su parte”. Esto lo dijo basándose en las conversaciones que tenía con Sinatra. Según dijo, Monroe respetaba y admiraba a Kennedy “pero no estaba dispuesta a romper el matrimonio [del presidente], así que no dejaría que llegara tan lejos, aunque lo sintiera tan profundamente”.
En el libro de Donald Spoto Marilyn Monroe: The Biography, el masajista y amigo de Monroe, Ralph Roberts, afirma que ella lo llamó en una ocasión para pedirle consejos para dar un buen masaje y que al fondo se escuchaba la voz de Kennedy.
Ya que varios afirman que lo que sea que tuvieran “no fue tan importante” para ninguno, resulta dudoso que Marilyn dejara que Kennedy la tratara con tanto desprecio como sugiere Blonde
Aunque era insegura, Marilyn ya se había casado y había tenido romances y aventuras con otras estrellas, incluyendo a Marlon Brando.
El biógrado James Spada sostuvo que después de que JFK se distanciara, Bobby Kennedy hizo su jugada con Monroe pero que la relación nunca tuvo la profundidad que tuvo con el primero.